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Metal Genocide

17 de Agosto de 2007 | 01:14 |
Metal Genocide

Tuvieron que pasar seis años para que esta banda revelación del heavy metal nacional de mediados de los noventa editara nuevamente un disco. Este cuarto álbum implica, además, la consolidación definitiva de Paulo Domic en la voz, luego de su incorporación en 2001.

Esta nueva producción consta de 12 canciones, de las cuales ocho están escritas en inglés y tres en español. La gran novedad es la incorporación de la instrumental “Vendimia”, hermosa pieza inspirada en la cueca chilena.

Desde un inicio, Metal Genocide sorprende al introducir un solo de guitarra antes de que Domic alcance a emitir una sola estrofa, rompiendo de esta forma con los esquemas habituales de composición en el género. Una a una se suceden canciones de gran calibre, en donde sobresalen riffs potentes y solos de guitarra ejecutados con la jerarquía acostumbrada de Manolo Schafler. Junto a él, una sólida base rítmica formada por el bajo de Cristián Maturana y la batería de Carlos Hernández, da vida a esta maciza placa de heavy metal duro y directo, sin barroquismos ni muestras exageradas de virtuosismo, a diferencia de la tónica imperante en la mayoría de las agrupaciones que practican el estilo en la actualidad.

El puesto de cantante le sienta bien a Domic, quien luce un buen dominio de la voz y pronuncia bastante bien el inglés, un detalle significativo y que, en cierta medida, le quitaba peso a los anteriores discos del conjunto, a cargo del primer vocalista Freddy Alexis. Domic también se ha ganado su espacio escribiendo las letras de las canciones, que tocan variados tópicos como la guerra, la muerte, los problemas sociales e incluso la mitología mapuche como se puede apreciar en el tema “Arde el volcán/ Pillán”. El grupo también recuerda hechos oscuros y dolorosos de la historia reciente de nuestro país, como los asesinatos cometidos por la Caravana de la Muerte en la canción “Caravan of Death”.

Musicalmente, Metal Genocide es un trabajo melódico que sobresale por la variedad y complejidad de sus estructuras armónicas. La mayoría de los tracks se caracterizan por su fuerza interpretativa y la velocidad de la ejecución, con excepción de “River to Weaping”, una pausada balada cargada de dramatismo. Hay temas muy bien logrados como “Raiders”, “Fire & Steel” y “Up the metal hammer!”, que tiene un novedoso inicio de teclados y un coro masculino en el estribillo.

En general, Metal Genocide sigue la misma línea melódica de los anteriores discos de Inquisición como Steel Vengeance (1997), Black Leather From Hell (1998) y Live Posthumous (2001). Sin embargo, diez años de trayectoria no pasan en vano. La experiencia acumulada se percibe favorablemente en la calidad de cada una de las canciones que conforman esta poderosa propuesta musical.

Nicole van Baal F.

Inquisicion. “Metal Genocide.” (2004, Negative)


1. Metal Genocide, 2. Raiders, 3. River to Weaping, 4. The Caravan of Death, 5. Fire & Steel, 6. Up The Metal Hammer!, 7.Temple of the Gods, 8. Trip to Damnation, 9. Vendimia, 10. El libro del Mal, 11. Ley de la Calle, 12. Arde el Volcán/ Pillan.

Intérpretes: Paulo Domic (voz), Manolo Schafler (guitarra), Cristián Maturana (bajo) y Carlos Hernandez (batería).

Producción: Manolo Schafler.
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