Common ground
Es un disco destacable pero no sorprendente el que ha preparado Yael Meyer para debutar como cantautora. Sus virtudes son evidentes y se ofrecen al auditor con generosidad: una voz afinada que no pretende más de lo que puede, intuición melódica suficiente para hacer avanzar con fluidez las doce composiciones (todas cantadas en inglés), referentes elegantes vinculados, principalmente, a la nueva electrónica (sobre todo, Air, Björk, Mum). Si se le suman sus credenciales académicas (la prestigiosa Berklee School of Music, en Boston) uno no puede negar que Yael tiene todo lo que hay que tener para no quedar como una aburrida cantautora con ganas de parecer
cool, y que su música tiene condiciones de trascendencia.
Sin embargo, es probable que su música sea mucho más atractiva en vivo que en disco. Los 65 minutos de este álbum se hacen excesivos, y los quiebres de ritmo en cada canción no alcanzan a hacer despegar por completo aquello que uno pudiera identificar como un sello autoral de fuerza distintiva. Que
Common ground sea el debut independiente de una chica chilena con real vocación por la música es, en sí, una buena noticia. El resto debe ponerlo su fogueo con el arte y la vida misma, lo único que podría añadirle a su trabajo la aspereza que ahora le falta.
Marisol García C.
Yael Meyer, "Common ground" (2004, GmbH)
1.The beauty of it all, 2.Don´t be afraid, 3.Spread the word, 4.Common ground, 5.Tanango, 6.Ilov, 7.It´s all true, 8.Whales, 9.Alone, 10.Only make you cry, 11.Lucas and Lorena, 12.The bubble.
Duración: 65:20. |
