EMOLTV

Demon days

17 de Agosto de 2007 | 01:14 |
La alineación oficial de Gorillaz sigue consistiendo en 2D (voz), la japonesa Noodle (guitarra), Murdoc Nicalls (bajo) y Russell Hobbs (batería), de profesión monos animados. Son los monos reales los que han cambiado. En Gorillaz (2001), el disco que lanzó al mundo a la banda, los hombres tras el cartoon eran Damon Albarn, cantante de Blur, y el productor Dan "The Automator" Nakamura. En Demon days, su segundo disco, Albarn administra el poder con el productor Brian "Danger Mouse" Burton –el DJ genio que mezcló a los Beatles y al rapero Jay-Z en The grey album (2004)– y lo multiplica en un desfile de invitados.

Entre ellos, el actor Dennis Hopper relata una fábula apocalíptica y es llamativo escuchar al cabecilla de Blur a dúo con el de los Happy Mondays, Shaun Ryder, pero la actuación de la cantante Neneh Cherry y del pionero rockero Ike Turner en coros y piano respectivamente es más sutil. Porque lo que se impone en Demon days es sobre todo una masa de hip-hop por cuenta de los raperos Roots Manuva, Bootie Brown, MF Doom y el siempre bienvenido trío De La Soul, que carga de energía y clase el primer éxito del disco, "Feels Good Inc."

La orquestación es otro acierto. Basta detenerse en ella para caer en la cuenta de que Gorillaz es un inusual conjunto de cuerdas y electrónica. La base de Demon days está armada así, con violines y cellos de verdad que reaccionan muy bien al contacto del rap y del pop o de la guitarra y la electrónica, mientras la entonación de Damon Albarn se pasea displicente por todas estas canciones y acentúa el estilo de la música. No hay en un gancho tan instantáneo como el del single "Clint Eastwood", del álbum anterior, pero aquí la canción "Dirty Harry" se encomienda a un personaje del mismo Clint Eastwood, y aunque el resultado es menos recordable, el falsete de Albarn y el coro de niños invitado le dan un sugerente estilo que remata en rimas raperas.

Si se trata del borde político que parece buscar Gorillaz, la banda animada está a medio camino entre lo transnacional –éste es el segundo disco clave del año para su compañía después del de Coldplay– y cierto aire insurgente: en la agenda global de Gorillaz hay asuntos como la destrucción del ecosistema en "O green world", el desencanto ante el futuro en "El mañana" y el tráfico corporativo de bienestar artificial en "Feels Good Inc.", mientras la foto de los cobradores de deudas nigerianos premunidos de hienas y mandriles que hay en el disco es impresionante y, en el mismo plano, "Kids with guns" parece hablar de los niños soldados de Liberia. Ahora que Pink Floyd se va a reunir para el show benéfico Live 8, deberían invitar a Gorillaz también. Estos monos tienen más que ver con el mundo como está ahora.

David Ponce

Gorillaz, "Demon days" (2005, Parlophone/EMI).

1. Intro. 2. Last living souls. 3. Kids with guns. 4. O green world. 5. Dirty Harry. 6. Feel Good Inc. 7. El mañana. 8. Every planet we reach is dead. 9. November has come. 10. All alone. 11. White light. 12. Dare. 13. Fire coming out of the monkey’s head. 14. Don’t get lost in heaven. 15. Demon days.

Músicos: Damon Albarn (voz y producción), James Dring (programaciones), Simon Tong (guitarra), Sally Jackson, Prabjote Osahn y Antonia Pagulatos (violines), Amanda Drummond & Stella Page (violas), Isabelle Dunn (cello), Al Mobbs & Emma Smith (contrabajo), Invitados: Neneh Cherry (voz), Booty Brown (voz), De la Soul (voces), MF Doom (voz), Roots Manuva (voz), Shaun Ryder (voz), Dennis Hopper (lectura), Ike Turner (piano), London Community Gospel Choir (coro).

Producción: Gorillaz con Danger Mouse.

Duración: 50’45’’

www.gorillaz.com
EL COMENTARISTA OPINA
¿Cómo puedo ser parte del Comentarista Opina?