CIUDAD DE MÉXICO.- El mural “Gloriosa Victoria", del pintor mexicano Diego Rivera, extraviado durante cinco décadas, será exhibido por última vez en el Museo Dolores Olmedo, al sur de la capital mexicana antes de viajar al museo de Bellas Artes de Moscú, donde pertenece.
La obra, que reseña la invasión estadounidense a Guatemala, en los años 50, fue visto hoy en el Palacio de Bellas Artes con motivo del 50 aniversario de la muerte del autor.
Desde mañana será trasladado a su último recinto, antes de ser devuelto a Rusia, donde pertenece al Museo Estatal de Bellas Artes Pushkin, de Moscú.
El mural plasma con tintes satíricos las figuras del secretario de Estado norteamericano John Foster Dulles y el líder contarrevolucionario guatemalteco Carlos Castillo Armas, celebrando la victoria de la invasión contra el gobierno democrático de Jacobo Arbenz.
Realizado sobre tela, muestra a niños y mujeres masacrados durante la operación armada y a campesinos que se resisten a la invasión, así como a monseñor Genaro Verrolino bendiciendo al nuevo gobernante.
Gloriosa Victoria, realizado en 1954 y regalado al gobierno soviético, estuvo extraviado durante casi cinco décadas, y fue hallado en 2000.
La tela mide 260 por 450 centímetros, y había sido confundido con un mural de Rivera que permanece extraviado, titulado Pesadilla de guerra y sueño de paz, que el pintor había donado a China y que se cree fue destruido durante la Revolución Cultural.
Rivera, junto con David Alfaro Siqueiros y José Clemente Orozco, son los tres más grandes muralistas mexicanos del siglo pasado.