Se espera que White Creep, que sale a la venta en Sotheby's mañana, alcance un precio de entre 2 y 3.5 millones de dólares.
EFELONDRES.- Peter Doig, pintor de origen escocés (Edimburgo, 1959) que el año pasado se convirtió en uno de los artistas británicos vivos más cotizados, al subastarse su obra "White Canoe" en 11.4 millones de dólares, consolida su estatus con una retrospectiva de mitad de carrera en la galería Tate Britain.
La exposición, que estará abierta al público del 5 de febrero al 27 de abril, cubre dos décadas de creación y comprende una cincuentena de pinturas al óleo, además de un importante grupo de trabajos sobre papel.
Al igual que otros artistas, Doig utiliza como punto de partida para su pintura recortes de periódicos o fotografías que toma él mismo, que le sirven únicamente, según ha explicado, para fijar y recordar luego ciertas formas.
El artista británico no es ningún fotorrealista ni tampoco un paisajista tradicional: sus escenas de lagos —casi siempre con canoas en las que aparece una figura— o de paisajes alpinos, las pinta siempre en el estudio, y tienen un marcado carácter alucinatorio.
La exposición de la Tate Britain, museo dedicado exclusivamente al arte británico, reúne obras de Doig procedentes tanto de colecciones privadas como públicas, entre ellas la titulada "Lapeyrouse Wall" (2004), actualmente en una colección particular, pero que se le ha prometido al Museo de Arte Moderno de Nueva York.
Una de las salas está dedicada a sus obras preparatorias sobre papel y documenta perfectamente la preparación con la que aborda todos sus trabajos y la recurrencia de imágenes como la de la canoa en medio de un lago.
Doig es un artista muy intuitivo, pero también tremendamente reflexivo, que, según ha reconocido él mismo, puede tardar meses en la terminación de algunas de sus obras, no tanto por la ejecución física como tal, en la que puede emplear sólo unas semanas, sino por la concepción.