SANTIAGO.- Desde Antonin Artaud y su quiebre artístico con el teatro de la crueldad a Claude Lévi-Strauss y sus análisis de los mitos con el estructuralismo, desde André Breton y el surrealismo a Michel Foucault y su crítica a los discursos de poder, la huella de la cultura francesa ha trascendido las fronteras lingüísticas de su país para situarse en 55 estados y gobiernos francoparlantes en los cinco continentes, los que albergan a unos 181 millones de personas.
Eso es lo que celebrarán las Embajadas y Representaciones Consulares y Gubernamentales Francófonas en Las Semanas de la Francofonía 2008, que se realizarán en el país entre el 12 y el 30 de marzo. Pero la oportunidad no implica solamente interiorizarse de la cultura nacida en Francia, sino además de los sincretismos intelectuales y mestizajes artísticos que se dan en países donde germina la lengua francesa. Así, desde 1970 se celebra cada 20 de marzo el Día Internacional de la Francofonía, conmemorando la firma en Niamey (Níger) del tratado de creación de la ACCT, hoy Agencia Internacional de la Francofonía.
Con actividades culturales en ciudades adicionales a Santiago, como Arica, Antofagasta, La Serena, Valparaíso, Viña del Mar, Chillán, Concepción, Temuco, Valdivia, Osorno y Coyhaique, las Semanas de la Francofonía llegará con exposiciones, conferencias, lecturas poéticas, concursos, torneos deportivos, catas de vino y degustaciones, a animar el verano en los días en que se retomen el trabajo y se inicie el año escolar.
Diversidad francófona
Muestra de la riqueza de la diversidad cultural francófona, es la delegación de Valonia-Bruselas, que rendirá un homenaje con distintas actividades al cantante Jacques Brel, "creador de un estilo influyente y un verdadero embajador de la cultura belga en el mundo", según los organizadores.
Con una mezcla interdisciplinaria dada por el tratamiento de una temática en un soporte, la Embajada de Suiza destacará la música popular francófona retratada por el fotógrafo Patrick John Buffe. Además, como es habitual se desarrollarán las exhibiciones de los festivales de cine francófono en varias regiones del país.
Las artes de la representación también tienen su lugar con la visita del mimo Phillipe Bizot, quien llevará su teatro del silencio de norte a sur del país y las actividades de la Corporación de Asistentes de Español en Francia (CAEF), que contempla el programa Francointegrate, con una pieza teatral a cargo de actores sordos.
Atención especial dada la relevancia de la difusión en el afianzamiento y perduración de una cultura, la Agencia Internacional de la Francofonía convoca la participación de los jóvenes en eventos como el Festival Internacional de Video Francófono Escolar, el Concurso de Cómic Francomics y el V Festival de la Canción Francófona.
Una visita relevante para la difusión de las experiencias en gestión de museos, es la del director del Museo Quai Branly de París, Stephane Martin, como parte del programa de conferencias. El Museo que dirige está especializado en colecciones de artes y civilizaciones de África, América, Asia y Oceanía y fue creado en 2006 por Jacques Chirac. Su importancia reside en que aúna las colecciones del Museo del Hombre y Museo nacional de Artes de África y de Oceanía.
Las semanas de la Francofonía tienen su fiesta culmine el 27 de marzo con la Nuit Gastronomique Francophone, donde los Embajadores de Argelia, Bélgica, Canadá, Egipto, Francia, Haití, Marruecos, Rumania, Suiza, Vietnam, la Delegada de Valonia-Bruselas, la Cónsul General Honoraria de Mónaco y la Representante del Gobierno de Quebec en Chile, invitan a degustar platos típicos de sus respectivas regiones a quienes accedan al evento mediante invitación.
El cine y la canción francófona tendrán como representante en Santiago la visita de la actriz y cantante franco-británica Jane Birkin, quien recordará en un concierto a su esposo el compositor Serge Gainsbourg (1928-1991), toda una leyenda de la música popular.
En la película "Blow Up" de Michelangelo Antonioni, Birkin protagonizó su primera escena polémica, donde aparece desnuda, un preámbulo de su facilidad para interpretar sentidos eróticos. De este modo, tras el fracaso matrimonial y el nacimiento de su hija Kate en 1967 y luego de sus inicios en el ambiente pop de Swinging London, Jane Birkin viaja a Francia.
En el país galo conoce al compositor -Serge Gainsbourg-, con quien forma una de las parejas de moda en la escena parisina, donde se hacen célebres en 1969 con “Je t'aime... moi non plus”, canción sensual y provocadora que convierte en un éxito mundial los suspiros de Jane haciendo el amor con su compañero. En 1971 nace su hija Charlotte Gainsbourg, una actriz y cantante reconocida.
De ahí en más, por 12 años, el creador compondría para ella adaptando las melodías a la voz de la cantante. Su lazo perduró más allá de la separación, pero las canciones se enfriaron y dejaron de tener la calidez con la que se hicieron populares. La cantante comenzaría a cantar en honor de quien fuera su esposo, incluso después de su muerte en 1991. Ahora llega a Chile para rememorar una vez más las canciones de Gainsbourg.