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El silencio terminó: Portishead regresa después de once años

Tras Portishead (1997) el 14 de abril llega a las disquerías Third, que incluirá un preestreno por internet y una edición de lujo que incluye vinilos, usb y arte de tapa a unos 35 mil pesos chillenos.

10 de Abril de 2008 | 08:49 | JC Ramírez Figueroa, El Mercurio Online

SANTIAGO.- A mediados de los '90, en el ojo del huracán, el britpopero hombre de Oasis Noel Gallagher dijo: "No queremos ser como esas bandas que sacan un disco, logran el éxito, descansan y cuando vuelven años después fracasan porque toda la escena cambió".

Portishead sería una de ellas. Elegantes, oscuros y grandes promotores del "sonido de Bristol". Con el disco Dummy (1994), la banda de Beth Gibbons fue un suceso atípico en el entonces renacido pop británico. Su sonido denso y sensual, influenciado tanto por la electrónica como las cantantes de blues de los '40, estaba totalmente alejado de la euforia guitarrera de las agrupaciones que dominaban el ranking independiente de la NME.

Recién once años después de su segunda entrega Portishead (1997), tras una etapa oscura, regresan con nuevo disco y gira promocional (no hay ninguna novedad sobre Chile hasta el momento).

Adelantos en blogs

Será editado la semana entrante, el 14 de abril. Contendrá once canciones y se llamará, "ingeniosamente", Third. Existe además una versión "de prueba" circulando en foros de internet. De hecho, los que la escucharon señalaron en sus blogs que el disco (si es que se asemeja a la version hackeada de Internet) los había dejado "un poco desilusionados".

Aunque para otros fans es "oscuro y perfecto". Su primer single "Machine gun" se puede escuchar en su MySpace. Una canción con el clásico downtempo Portishead, cuya base remite al sonido "industrial" y donde destaca la voz de Gibbons en perfecta forma. Hacia el final entran unos teclados como salidos de un single de Joy Division.

Honestidad brutal

Según el guitarrista Adiran Utley, los músicos de la banda sentían que era una obligación grabar Third. Pero, reconoce, "a veces pensábamos que sería imposible acabar el disco... quería morirme". Un gesto de debilidad poco común en el mundo de la música, donde es normal cerrar la boca ante las dificultades de estrenar nuevo material.

La sinceridad de Portishead es, además, notable: antes habían reconocido a la prensa no saber manejar la presión de excelentes críticas y el éxito de público, viviendo en un posterior "infierno".

En los '90, metidos en el mismo saco de Blur, Ocean Colour Scene o Bluetones, incluso por la misma prensa inglesa, impulsaron un estilo que no tenía nada que ver con las guitarras Les Paul, los Beatles o el glam de David Bowie. El "trip-hop", como se etiquetó a la música que hacían junto a visionarios como Massive Attack (remitirse a su celebrado Blue lines de 1991) o posteriormente el infernal Tricky, miraba a otro tipo de pasado. El viejo swing, el blues "desenchufado", el jazz y sobre todo la figura de Nina Simone eran actualizados con elementos electrónicos. El resultado era tan sensual como oscuro.

El factor internet

El preestreno de Third será por Internet, este 11 de abril en el sitio Current TV (http://www.currentv.com). Según NME, las muestras serán grabadas en la ciudad donde la banda tomó el nombre, siendo titulada la sesión "Portishead in Portishead".

A pesar de los rumores de un nuevo "gesto" a lo Radiohead, donde el usuario le ponga el precio al disco, no hay ninguna señal en el sitio de la banda. Solamente el apetitoso box-set que saldrá a la venta el 28 de abril y que ya se puede encargar en su sitio oficial.

Por unos 35 mil pesos chilenos se podrá acceder a un coqueto USB con forma de "P" que contiene el disco, ademas de videos, una edición doble de vinilo, el single "Machine gun" en vinilo y el arte de tapa. Sólo para fanáticos.

Sitio oficial
Canciones aquí
La portada aquí

Antes del tercero, el segundo y el primero

Dummy (1994): El primer disco de Portishead puso el sonido del trip-hop en el mapa mundial, con melodías como las de "It’s a fire" y "It could be sweet", los órganos y scratches que se oyen en "Numb" y dos éxitos de marca mayor: "Sour times", reconocible por el verso "Nadie me ama… como tú lo haces", y "Glory box", donde Beth Gibbons se explaya en la estrofa "Dame una razón para amarte / Dame una razón para ser… una mujer. Sólo quiero ser una mujer".

Portishead
(1997): Tras el primer impacto, el segundo álbum del grupo retoma el sonido inicial sin apartarse de su sello: timbres de instrumentos cortados y pegados además de procesados, un sonido frío y claustrofóbico, y la voz de la cantante siempre entre lo etéreo y lo dramático. Otros dos éxitos coronan la continuidad de Portishead aquí: "Cowboys", el primero, y las fanfarrias de trompetas sampleadas que resuenan en la vibrante "All mine".

Bonus: PNYC
(1998): Una tarde con Portishead. Un domingo aburrido en Nueva York, si es que puede haber un día aburrido allí. Portishead se presentó en el Roseland Ballroom con una orquesta sinfónica de 35 músicos. Las mismas canciones pero sin trampas de producción. Todo tocado en vivo y directo y con Gibbons en su mejor performance, como una Billie Holiday blanca y moderna. Para muchos, el disco definitivo del grupo. A pesar de que no figura en la cuenta. 

1. Silence
2. Hunter
3. Nylon smile
4. The rip
5. Plastic
6. We carry on
7. Deep water
8. Machine gun
9. Small
10. Magic doors
11. Threads