LONDRES.- La adaptación musical de "Lo que el viento se llevó", que se estrenó mundialmente en Londres el martes por la noche, no cautivó a la crítica, que le reprochó la falta de pasión entre Scarlett O'Hara y Rhett Butler, pero el público le dio una ovación de pie.
El crítico de Daily Telegraph, Charles Spencer, escribió que no había "química sexual" entre los dos protagonistas principales, encarnados por Jill Paice, una actriz de Broadway poco conocida y el británico Daniel Danesh, que se dio a conocer en la serie "Pop Idol".
Paice "es bonita y llena de energía, pero no tiene el peligroso erotismo que le pide el rol", escribió Spencer, que reprochó a las canciones "carecer de brillo".
La recreación en las tablas de la novela de Margaret Mitchell sobre la guerra civil de Estados Unidos, que fue inmortalizada en el cine en 1939, con Clark Gable como Rhett Butler y Vivienne Leigh en el papel de Scarlett, recibió sólo dos estrellas - de cinco posibles - de la crítica del diario The Times, Benedict Nightingale.Danesh "tiene la despreocupada elegancia que Gable dio a Rhett, pero no la suficiente gallardía y peligro", escribió Nightingale, que opina que la Scarlett O'Hara retratada por Pierce "no tiene suficiente fuego interior".
El crítico del diario Independent, Paul Taylor, dio tres estrellas a la pieza que ha llevado al teatro el director británico Trevor Nunn, que hizo su reputación en el teatro dirigiendo piezas de Shakespeare pero que también ha creado musicales exitosos como "Cats" y "Los Miserables".
"El diabolicamente encantador Darius Danesh aporta una seducción insolente, una voz aterciopelada" y un auténtica emoción al personaje de Rhett", escribió el crítico de The Independent, Paul Taylor, que no quedó seducido por la actriz que da vida a Scarlett, que le pareció no era suficientemente "felina".
Para el crítico de Daily Express, que dio tres estrellas a la obra, es Danesh quien salva el espectáculo, que halló largo y por momentos monótono.
Michael Billington, en “The Guardian”, le dio dos estrellas, pero elogió la interpretación de Paice y de Danesh."Jill Paice hace un trabajo excelente de reconciliarnos con una de las heroínas de la literatura más seductoras", escribió, señalando que Darius Danesh recrea el personaje de Butler con "gracia y virilidad".
No hay duda que el proyecto de llevar esta mítica novela a las tablas era ambicioso y osado, sobre todo, porque Nunn - ex director del prestigioso National Theatre y que ha puesto hasta ahora 31 de las 37 piezas de Shakespeare - colaboró con una doctora de 53 años que nunca ha trabajado en el teatro.
La estadounidense Margaret Martin, autora del libreto y la música, es quien tuvo la iniciativa de recrear esta obra en el teatro, y que convenció a Nunn que la dirigiera.
Sin embargo, será el público quien tenga la última palabra. La historia del West End, el barrio de los teatros londinenses, está marcada por muchos momentos en que la crítica británica y el público están en lados opuestos.
Así ocurrió con "Los Miserables", que fue fustigada por los críticos, pero que cautivó al público, que mantuvo el musical en cartelera durante más de dos décadas.