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Rodolfo Mederos trae a Chile a una de las más fuertes orquestas típicas tangueras

El bandoneonista porteño se presenta este lunes y martes en el Teatro Municipal.

23 de Abril de 2008 | 11:54 | El Mercurio Online
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Rodolfo Mederos: alma, bandoneón y pan. Su vida está en el tango. El prestigiado director de típica llega al máximo teatro capitalino.

Archivo

SANTIAGO / BUENOS AIRES.- El bandoneonista argentino Rodolfo Maderos se presentará junto a su orquesta típica de 13 músicos este 28 y 29 de abril en el Teatro Municipal capitalino.

“La orquesta es como una fiesta donde uno invita a todos los amigos, y el trío es como tomar un café con algunos de ellos”, comenta Mederos acerca de su espectáculo, en el que mezcla dúos, tríos, orquesta típica y baile.

Mederos tenía cinco años cuando un vecino de su barrio, al ver la fascinación del pequeño por el sonido melancólico del bandoneón, le regaló uno. Fue el comienzo de una carrera que no se detendría jamás.

El propio Mederos afirma que el bandoneón es como su casa, como un matrimonio. Es un amor que no puede dejar, aunque tengan ciertas “diferencias” en algunas oportunidades.

Solo, dúo, trío, todos

El músico y director de la Típica Rodolfo Mederos Viene de ofrecer conciertos en China. Tiene dos fechas programadas en Santiago en el Teatro Municipal, el lunes 28 y martes 29 de abril a las 19.00 horas.

El músico cree que el tango no es una expresión solamente de la ciudad de Buenos Aires, sino música de las ciudades del mundo. Rodolfo Mederos es un bandoneonista, director, docente, compositor y arreglador. Su actividad abarca la composición de obras desde populares hasta sinfónicas, a través de distintas agrupaciones instrumentales, sin olvidar su condición de intérprete.

Mederos ha sido considerado un virtuoso del banedoneón en Buenos Aires. Afirma que “históricamente este instrumento fue la herramienta capaz de interpretar los sentimientos de nostalgia, lejanía y soledad que marcaron al tango como música de inmigrantes. Son como el anverso y el reverso de una moneda: no se puede entender el tango sin el bandoneón, y el bandoneón busca al tango aunque pueda también usarse para otros géneros. Son una pareja indisoluble”, comenta.

Los precios de las entradas son los siguientes: Platinum ($27.000), Sillón Orquesta ($25.000), Vip ($22.000), Balcón ($17.000), Preferencial ($12.000), General ($5.000), Balcón Lateral y Galería ($3.000).

El programa considera partes definidas: piezas para bendoneón solo, trío de tango, cuarteto de bandoneones, quinteto ampliado y orquesta típica.

La nobleza del bandoneón

Para Rodolfo Mederos, “el bandoneón tiene el olor a la casa, a la comida, a la ropa planchada y limpia, a los elementos nobles con los que está hecho: cola, hueso, madera... Es como con los amigos o con la mujer: hay épocas en que estamos muy bien, hay épocas en que nos peleamos un poco o tenemos diferencias”.

Nacido en 1940 en el barrio porteño de Constitución, Mederos fue estudiante de biología, coleccionista, cineasta y carpintero antes de convertirse en músico a tiempo completo.

Después de descubrir el género en el patio de la casa, entre rondas de pasteles y mate de domingo, Mederos transitó varios caminos. Desde aquel Octeto Guardia Nueva de sus años mozos, al grupo Generación Cero, con el que ensayó una mezcla de la canción porteña con el jazz y el rock para convertirse en músico de culto de los jóvenes en los setenta.

El músico se dedica a resucitar el repertorio de los albores del siglo XX: desde tangos virtualmente desconocidos a los de autores como Eduardo Arolas, Agustín Bardi o Vicente Greco, y hasta rancheras, polkas y otras piezas de la música campesina de entonces.

Ha trabajado con Osvaldo Pugliese, Astor Piazzola, Daniel Baremboim, Alberto Cortez, Mercedes Sosa e incluso Luis Alberto Spinetta.

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