El afiche de la polémica cinta ''Il divo'', del realizador italiano Paolo Sorrentino.
EFE
ROMA.- El ex siete veces jefe de gobierno italiano Giulio Andreotti, una de las figuras más controvertidas de la política italiana, manifestó su ira con el retrato de su personalidad hecho en el filme "El divo", que concursa en el festival francés de cine en Cannes.
El filme, dirigido por el italiano Paolo Sorrentino, que concursará el 23 de mayo próximo en Cannes, fue presentado en una proyección privada a Andreotti, quien lo rechazó completamente.
"Es un filme maléfico, me retrata como a un cínico y no lo soy. ¿Que si se puede decir que es estéticamente bello? ¡No lo sé ni me interesa!", clamó furioso el anciano líder político a un periodista de La Repubblica.
Sorrentino, autor de "Las consecuencias del amor" (2004) y "Amigo de familia" (2006), retrata al hábil dirigente italiano, quien manejó las riendas del poder durante más de medio siglo, como a una persona misteriosa, ambigua y descarada.
La película narra las presuntas relaciones de Andreotti con la mafia siciliana, delitos por los que fue procesado en los años 90 y absuelto, entre ellos el haber pedido el favor a Cosa Nostra de hacer desaparecer a un periodista incómodo, Carmine Pecorelli.
En "Il Divo", el actor Tony Servillo, que interpreta a Giulio Andreotti, enumera la lista de muertos misteriosos de aquella época, entre ellos Aldo Moro, líder de la Democracia Cristiana, secuestrado y ejecutado por las Brigadas Rojas en 1978 tras 55 días de cautiverio, durante los cuales el Estado italiano se negó a negociar con el grupo terrorista. "Es necesario ser malo para hacer el bien", sostiene el personaje de Sorrentino.
"Eso no, eso es demasiado. No es correcto contar la muerte de Moro así", se rebela Andreotti, senador vitalicio.
Además de "Il Divo", Italia compite en la sección oficial de Cannes con el filme "Gomorra" de Matteo Garrone, basado en la exitosa novela homónima antimafia de Roberto Saviano.