NUEVA YORK.- Francisco Costa, Tom Ford y Tory Burch coronaron su trayectoria en el mundo del vestido el lunes cuando fueron declarados los principales ganadores de los premios del Consejo del Diseñador de Moda de Estados Unidos, el honor máximo en la especialidad.
Costa, diseñador de Calvin Klein, fue llamado al podio por la actriz Eva Mendes, quien había anunciado el galardón en compañía de Victoria Beckham y Maggie Gyllenhaal. Cada una actuó como si fuera la porrista de su modisto favorito: Mendes con un lustroso vestido largo de Costa, Beckam con un minivestido vaporoso de Marc Jacobs y Gyllenhaal con una blusa verde y negra a cuadros que llegaba a media pierna de Proenza Schouler.
“Sinceramente aprecio toda su ayuda”, dijo Costa a los editores, estilistas y distribuidores que por segunda ocasión le dieron su voto como el mejor diseñador de prendas femeninas.
Los premios del consejo, conocido por las siglas de CFDA en inglés, llegó a su 26ta entrega en que repitió su condición como un punto de encuentro de personalidades de la moda y celebridades que suele causar atascamientos viales frente a la Librería Pública de Nueva York donde se lleva a cabo. Eva Longoria Parker, Tony Parker, Kim Cattrall, Mandy Moore, Lauren Hutton, Tina Fey, Amy Poehler y Hilary Duff destacaron entre las figuras que gustan de los diseños de Ralph Lauren, Donna Karan, Vera Wang y Carolina Herrera.
El alcalde Michael Bloomberg estuvo presente — pero no como invitado. Recibió su propio premio de la Junta Directiva del CFDA por su compromiso por mantener vigorosa a la industria del vestido de la ciudad.
El diseñador parisino Yves Saint Laurent, que falleció el domingo de cáncer cerebral a los 71 años, estuvo presente en la memoria de numerosos miembros de la comunidad de la moda. La presidenta del CFDA Diane von Furstenberg, con un traje tipo esmoquin de YSL, puso en marcha la ceremonia con un homenaje.
“Yves fue un artista que siempre nos sorprendió”, dijo de su amigo de toda la vida. “Siempre dijo que quería ser Matisse, pero creo que Matisse habría querido ser él”.
