EMOLTV

Con los amigos

Al modo de la antigua peña urbana pero de raíz folclórica, el cantautor hizo piezas de su elogiado Pánico (2005), adelantó canciones de su próximo Témpera (2008) y puso en acción al carismático y enigmático Chinoy, directamente de Valparaíso.

16 de Junio de 2008 | 14:50 |
imagen

Manuel García en el Galpón Víctor Jara.

Archivo

Aunque el afiche de este concierto anunciaba a Manuel García y al “artista invitado” Chinoy, en realidad escondía varios detalles. Chinoy fue de verdad un invitado y no, como se acostumbra, un telonero. Se tomó el escenario en plena presentación de Manuel García y en solitario disparó unas cuantas canciones. Es casi literal, sus canciones son como un latigazo: raras, amargas, inasibles, disonantes a ratos. El montón de imágenes que hay en sus letras se llena de tensión en vivo. Golpea ambos pies contra el escenario, desata su voz nasal y agudísima y convierte la guitarra en una ráfaga.

Antes, Manuel García explicó su idea de crear un ambiente casero, con un espectáculo heredero de las peñas que se hicieran “hace no tanto tiempo en Chile”. Quizás por eso no hubo reparos con el excesivo tiempo que pasó entre cada tema, con una entrada en falso y una informal “Rasguña las piedras” -original de Sui Generis- para introducir otra canción reciente llamada “Piedras”. Por lo mismo, además, García terminó cantando sin micrófono y la noche se alargó después con otros músicos empuñando guitarras, incluido el mismo Chinoy.

El vocalista de Mecánica Popular casi no alcanzó a estar solo sobre el escenario y apenas unas pocas canciones fueron con guitarra y voz. A la mayoría podían sumarse más guitarras -electroacústica, eléctrica de 18 cuerdas o acústica-, bajo, batería y hasta cuatro y bombo. Esa banda hizo una ruidosa versión de “Hoy no empañemos el agua”, de Chinoy, y más tarde estaba haciendo otra de “El arado”, de Víctor Jara, junto a Ismael Oddó, el integrante más joven de Quilapayún, que también estrenó en solitario “Tango del Willy”, dedicado a su fallecido padre, Willy Oddó.

El concierto tuvo canciones de Pánico (2005) y algunas ya grabadas para Témpera, disco que se editaría este año. De este modo, el público inició un coro en “Tu ventana” y hasta que el cantante la entonó en catalán hizo lo mismo con “El viejo comunista”, pero también escuchó otras más nuevas, aunque hace tiempo tocadas en vivo, como “Colores” y la festiva historia provinciana que es “La gran capital”. Manuel García se notaba incómodo en el estrecho escenario y su exigida voz por momentos desafinaba, en particular en las notas bajas, pero sus canciones, evocadoras y de sencilla belleza, fueron seguidas casi con devoción por los asistentes.

Casi al final, el silencio reinó entre los asistentes cuando se proyectó un video de Víctor Jara y su voz y guitarra fueron acompañadas por Manuel García y sus músicos en “Luchín”. Era el invitado imposible y la prueba de que, al menos en este concierto, Manuel García prefería tocar con los amigos.

EL COMENTARISTA OPINA
¿Cómo puedo ser parte del Comentarista Opina?