NUEVA YORK/LOS ANGELES.- Los estudios de Hollywood lanzaron la que calificaron de "última oferta" al sindicato de actores, lo que imprimió nuevo movimiento al conflicto en el mundo del cine poco antes de que venciera el actual convenio colectivo en la medianoche del lunes.
La propuesta de los productores a los actores aumenta sus ingresos en 250 millones de dólares (unos 160 millones de euros), según la página web de la revista "Entertainment Weekly".
"Nuestra última oferta expresa la esperanza de evitar nuevas huelgas", explicó la asociación de productores de cine y televisión. El sindicato de los actores, el SAG, pidió tiempo para analizarla e indicó a sus 120.000 miembros que pueden seguir trabajando de forma temporal sin convenio colectivo.
De esta forma se evita por el momento una nueva huelga tan sólo pocos meses después del espectacular parón de los guionistas.
Al igual que éstos, los actores exigen una mayor participación en las ganancias por la exhibición de sus trabajos en Internet y en DVDs. El conflicto, que lleva varios meses, ha dividido a los actores. Mientras que estrellas como Jack Nicholson, Viggo Mortensen y Holly Hunter quieren seguir negociando, otras como Tom Hanks, Alec Baldwin y Kevin Spacey proponen firmar un acuerdo ya aprobado por sus colegas de la televisión y la radio.
Debido a ello, George Clooney escribió la semana pasada una carta abierta en la que pide unidad. Propone además que un grupo de intérpretes famosos se reúna una vez al año con los jefes de los estudios para aclarar temas que interesan a todos. Por el momento el sindicato sigue controlando la situación.
La asociación de actores de radio y televisión, la AFTRA, pidió a sus 70.000 miembros que se pronuncien hasta el 8 de julio acerca del nuevo acuerdo. En vista de que unos 44.000 actores de la AFTRA pertenecen a la vez al SAG, el resultado es considerado una muestra de la disposición o no a la huelga de los artistas.
El invierno (boreal) pasado, los 100 días de huelga de los guionistas paralizaron a Hollywood durante meses y causaron a diario pérdidas por unos 23 millones de dólares.
