Viera-Gallo en su semana mediática: "Mi hija sabe más de televisión que yo"

SANTIAGO.- Tal como ocurrió con sus críticas a los “realities” y al afán de coleccionar corazones del sicópata de “Alguien te mira”, el ministro Secretario General de la Presidencia, José Antonio Viera Gallo, volvió a causar polémica por su desacuerdo con “la violencia excesiva”, que según dice,  se muestra en “El Señor de la Querencia”.

Claro que esta vez sus palabras recibieron más rechazo que apoyo por parte de quienes trabajan en el mundo televisivo. Hasta la hija del ministro, la montajista María Teresa Viera-Gallo, se despachó una frase en las Últimas Noticias que causó simpatía: “Me da risa que mi papá esté obsesionado con las teleseries nocturnas”.

El ministro, que se lo tomó con humor, reitera su postura pero aclara que lo suyo no está en prohibir o censurar, sino que en generar un debate.

“La televisión es una gran plaza pública, donde ocurren muchas cosas, la mayor parte de ellas positivas”, dice Viera-Gallo a Emol. “Pero también hay cosas que son negativas, yo creo que es importante que los ciudadanos discutamos, debatamos. No necesariamente uno tiene la razón. Lo importante es promover una discusión, que revela una teleaudiencia consciente y activa, que reacciona con elementos para juzgar lo que está viendo”.

¿Le preocupa la calidad de la televisión chilena?
“Me preocupa la calidad de la televisión en general. No sólo la de Chile. Pero destaco nuestra televisión todavía tiene un rasgo de servicio público. Sin embargo, es muy fuerte el peso del mercado”.

Como tomó las palabras de su hija, que dice que se preocupa demasiado de las teleseries nocturnas.
“Ella trabaja en el medio audiovisual, es montajista, así que sabe mucho más de televisión que yo”.

Ella dijo que cuando usted prende la tele, justo le aparece la escena violenta.  Y eso influye en su opinión.
“Debo reconocer que no soy un asiduo telespectador. En el caso de El señor de la Querencia, lo que he dicho es que habiendo escenas de violencia excesiva, eso merece una discusión (...) Me preocupa la calidad de los mensajes y sobre todo me preocupa la calidad de las escenas, porque eso tiene mucha influencia en la cultura de la gente. En Estados Unidos hay varios estudios sobre televisión, que son contradictorios. Unos dicen que tiene enorme influencia en el comportamiento de la gente y otros, que no, que la gente es capaz de decodificar el mensaje. Es un debate”.

¿No retó a su hija?
“Pero como se le ocurre. La quiero mucho y sabe más que yo. Ella es del medio televisivo... Como le decía, me parece bien que se debata y me quedo con las palabras de Vicente Sabatini, que invita a debatir las cosas. Pero me gustaría que estos debates se dieran en la pantalla. Sería un gran servicio, que la televisión hiciera un esfuerzo para reflexionar sobre sí misma”.

¿Qué espera de todo este debate?
“Que la televisión mejore cada vez más, que no se busque sólo el mercado, que no esté sometida sólo al rating. Pero no podemos poner todo en un mismo plano, hay muchos espacios que son  de una gran calidad y que apuntan al servicio público”.