LOCARNO.- Un mar de flores, arcadas y calles decoradas y restaurantes de punta en blanco. Así se presenta la ciudad suiza de Locarno para los 11 días del 61° Festival Internacional de Cine, que tiene a una cinta chilena en una de sus competencias.
"Alicia en el país", de Esteban Larrain, será la carta nacional en la categoría Directores del Presente del destacado certamen europeo, que será el escenario del estreno mundial de la película que también estará compitiendo en el próximo Festival de Cine de Valdivia.
Fuera de concurso, en la muestra Play it Forward, estarán otras cintas nacionales: "El pejesapo", de José Luis Sepúlveda; y "Trance", de José Luis Torres Leiva. En el apartado Open Doors se exhibirán "Desde lejos" y "Lo que trae la lluvia", cortometrajes de Alejandro Fernández; "En la cama", de Matías Bize"; "El cielo, la tierra y la lluvia", de Torres Leiva; "I Love Pinochet", de Marcela Said (una producción española).
En la sección Open Doors Factory, donde se exhiben películas en construcción para conseguir financiamiento y distribución, estarán "El verano de los peces voladores", de Said; "La vida de los peces", de Bize; y "Sentados frente al fuego", de Fernández.
La inauguración de hoy está a cargo de la película inglesa "Brideshead Revisited", de Julian Jarrold, que se estrena así en Europa. El papel principal del film basado en la exitosa novela de Evelyn Waugh está en manos de Emma Thompson. El estilo esplendoroso y el romanticismo de la película se adaptan a la perfección a la atmósfera del festival, que con sus exhibiciones en la Piazza Grande en una de las mayores pantallas del mundo se jacta de ser la más hermosa sala de cine al aire libre del planeta.
Con el evento de este año, que dura hasta el 16 de agosto, se estrena también una nueva iluminación. A la caída del sol habrá luces que proyectarán colores mediterráneos sobre las fachadas medievales del centro. El escenario recordará así la atmósfera de clásicos del cine como "Casablanca" o "Lo que el viento se llevó". La ciudad se ha preparado este año de forma suntuosa para el festival.
Miles de fans del cine han acudido a Locarno y prometen ingresos récord a los hoteles o se alojan en tiendas de campaña en el valle del Maggia, que baja de las montañas y desemboca en el lago Maggiore. En la Piazza Grande se espera la presencia cada noche de entre 8.000 y 9.000 personas.
Compiten por el premio principal, el Leopardo de Oro dotado con 90.000 francos suizos (unos 86.000 dólares), 18 películas, otras tres de ellas latinoamericanas: "Parque Vía", del mexicano Enrique Rivero; "Dioses", una coproducción de Perú, Argentina, Alemania y Francia, de Josué Méndez; y "Um Amor de Perdiçao", de Mário Barroso y coproducida por Brasil y Portugal.
En 12 secciones, el festival mostrará un total de 400 películas, aunque la mayor atracción son las proyecciones al aire libre. Son estrenos nueve, la mitad de los films que se exhiben allí.
Repite como director artístico del festival este año Frédéric Maire, aunque hace dos meses anunció que dejará el puesto para hacerse cargo del archivo nacional de cine suizo. En sólo tres años, Maire ha vuelto a poner al festival entre los más importantes del mundo y su sucesor podría ser anunciado durante el evento.
