Reeditan exitosa saga prehistórica "Los Hijos de la Tierra"

SANTIAGO.- Imagine un mundo lejano y hostil, sin tecnología, sin gobiernos, ni ciudades o medios de transporte. Viviendo bajo la amenaza constante de bestias salvajes, condiciones climáticas extremas y la incertidumbre de buscar diariamente alimentos y refugio.

Así era Europa hace unos 27.000 a 29.000 años, durante las primeras etapas del Paleolítico Superior, período durante el cual coexistieron dos tipos de seres humanos: los Neandertales, versiones primitivas de nosotros mismos, con una menor capacidad craneal y posiblemente carentes de un lenguaje; y los Cromagnon, la rama más evolucionada de la humanidad. Y que acabó por reemplazar a los Neandertales tras su extinción.

Este es precisamente el mundo de la saga literaria “Los Hijos de la Tierra” (Maeva / Océano, 2008), de la escritora estadounidense Jean Marie Auel (1936), y cuya protagonista es Ayla, una niña Cromagnon de cinco años que tras un terremoto que destruye el campamento donde vivía, acaba siendo adoptaba por unos extraños habitantes de la región: el Clan del Oso Cavernario, que son neandertales.

La investigación para el primer libro de su serie, “El Clan del Oso Cavernario” (1980), comenzó en 1977, estudiando en profundidad la Edad de Hielo y tomando intensos cursos de supervivencia para aprender, por ejemplo, a construir un refugio de hielo o la manera primitiva para hacer fuego.

Tras este primer título siguieron “El Valle de los Caballos” (1982), “Los Cazadores de Mamuts” (1985), “Las Llanuras del Tránsito” (1990) y “Los Refugios de Piedra” (2002). Todos los cuales este año fueron reeditados en edición de bolsillo y están disponibles en las librerías locales a precios que fluctúan entre los $ 6.500 y los $ 7.900.

En 1986 el primer libro de la saga, “El Clan del Oso Cavernario”, fue adaptado al cine bajo la dirección de Michael Chapman. En el papel de Ayla estuvo nada menos que Daryl Hannah (“Blade Runner”, “Wall Street”). Pero como la mayoría de la cinta no tiene diálogos y los personajes se comunicaban con gestos, al público le costó “meterse” en la historia. Eso se tradujo en baja recaudación y determinó que no hubiera una secuela.

Aunque en los últimos años algunos descubrimientos arqueológicos han vuelto  inexactos ciertas afirmaciones de estos libros, tanto críticos como antropólogos coinciden en que el trabajo de Jean Marie Auel es de gran valor, en la medida que logró reconstruir una época perdida de la historia, en la que todavía no existía la escritura.

Actualmente la autora está trabajando en un sexto libro de la serie, eventualmente para publicarse en 2010, y para el cual viajó a las cuevas de Altamira y al yacimiento de Abric Romaní (Barcelona), entre otros.