Habló Charly García: "Si Palito no aparecía, me estaría cortando las venas"

BUENOS AIRES.- "Primero te desintoxican, y ahora me estoy desintoxicando de la intoxicación y es más difícil, porque te deja lento, te deja gordo, te deja tonto", dice Charly García, siempre escéptico en torno a los tratamientos de rehabilitación y similares, por mucho que en este momento esté en uno.

El músico concedió su primera entrevista tras el colapso que lo llevó a la internación en junio, cuando salió amarrado a una camilla desde el hotel que se le ocurrió destruir en Mendoza. A la última edición argentina de la revista Newsweek, el legandario rockero trasandino dijo que "es muy rara esta industria de la recuperación. Tiene muchas fallas y el que sufre realmente es el paciente. Yo la pasé muy mal. A veces los tratamientos, si es que existen, encierran a veinte personas, para darle pastillas y sedarlos. Y eso te va reduciendo a una planta".

Según García, "no tendrían que existir estos lugares (hospitales psiquiátricos), siento mucho por los que todavía están ahí. Lo peor yo ya me lo banqué. Se pasaron meses evaluando si era neurótico, esquizofrénico, psicótico, personalidad dual o qué se yo. Y cada grupo de médicos me daba o me sacaba pastillas. Y me hicieron muy mal".

La situación para el músico cambió hace dos meses, cuando cambió las paredes blancas de los recintos hospitalarios por la comodidad del campo de Ramón "Palito" Ortega, el histórico cantautor argentino que lo acogió en su casa para culminar su recuperación. "Si Palito no aparecía, yo la estaría pasando muy mal, me estaría cortando las venas, qué se yo", confiesa.

En la amplia vivienda ubicada en la localidad de Luján, García es permanentemente asistido y supervisado por una jueza, un psiquiatra, enfermeras y asistentes terapéuticos. De este modo, el músico cumple con un programa de alimentación (que no excluye asados ni tortas, y que ya le reporta un alza de diez kilos) y ejercicios, además de la práctica con distintos instrumentos.

Un presente con algo más de luz, tras un período reciente que García ve como altamente oscuro. "Lo que más miedo me daba, era quedar un poco lisiado del corazón de sufrir tanto. Hay momentos en que la angustia aprieta y estas ahí y no te queda otra que aguantar. Hay que tener aguante", asegura.

A pesar de todo, el autor de piezas como "Demoliendo hoteles" y "Yendo de la cama al living" ha podido darse los espacios para componer y grabar algunos demos. "Algunos son de cuando decían que estaba loco y otros de acá", cuenta, y en seguida canta un fragmento de uno de los temas que grabó junto a músicos como Fabián Von Quintiero, Pedro Aznar o Nito Mestre: "Y si no pierdo la esperanza / a veces con vivir no alcanza / voy a tomar un poquitito más / de aquella medicina del doctor".