EMOLTV

Director de "Infieles": "El éxito no pasa por los desnudos y el sexo"

Rodrigo Díaz habla del nuevo ciclo del programa, y anuncia novedades: edición en DVD y película. María Laura Donoso y Tatiana Merino son protagonistas de la nueva temporada.

24 de Septiembre de 2009 | 13:46 | Leonardo Núñez, El Mercurio Online
imagen

El director general de Infieles, Rodrigo Díaz, dice que le sorprende que la critica televisiva no le dé duro al show, siendo un país tan conservador el chileno. También le sorprende el gusto del público por ver a actrices nacionales en pantalla.

Cristian Soto, El Mercurio

SANTIAGO.- "Infieles", de Chilevisión, ya en un clásico de la TV local. Hoy, con un capítulo protagonizado por Tatiana Merino (22:00 horas), la serie picaresca inicia un nuevo ciclo tras cinco años al aire.

Y no es la única novedad. Las mejores historias del show, recordado por los desnudos de Marlen Olivari y María Isabel Indo, entre otros, tendrán una edición en DVD y, en 2010, sus realizadores esperan estrenar una película, que ya tiene el presupuesto aprobado.

¿Cómo un programa dura tanto en pantalla, recurriendo a un mismo tema: la infidelidad? El director general del programa, Rodrigo Díaz, trata de explicar el fenómeno, que este año se anotó otra conquista: La modelo María Laura Donoso aceptó integrarse al show. En un capítulo imperdible, protagonizará un desinhibido partido de golf con un caddy.

"No es fácil tener al aire un programa por 5 años", dice Díaz. "En el camino, te caes, te pasan cosas. Si alguna vez tuvimos un bajón, reencantamos al público con las historias. El éxito de 'Infieles' no pasa por el sexo, por el desnudo, pasa por la historia. Hay estudios hecho por los gringos, capos en el tema, que demuestran que las escenas de sexo alejan a los telespectadores".

Por ello, los realizadores siguen tratando con cuidado los guiones en este nuevo ciclo, con historias centradas en personajes chilenos reconocibles por el público. El personaje Merino, por ejemplo, tiene una fábrica de empandas y tiene un affaire con un vendedor de gas, quien se aprovecha del poco cariño que a ella le da su esposo, un promotor de las tradiciones chilenas.

Donoso, por su parte, está casada con un millonario que la trata como si fuera su trofeo; algo que les ocurre a muchas mujeres del barrio alto, según Díaz. La obsesión por contar historias “bien” chilenas también se refleja en el rating, agrega el director.

"Hemos traído actrices argentinas, como Pamela Sossa, que pegaba mucho en Morandé, o Jessica Cirio. Pero nadie se acerca a los promedios (de rating) de las actrices nacionales. En definitiva, el chileno, la chilena, se quiere ver en pantalla. El capítulo de Jessica Cirio, con su cuerpo escultural, fue importante, pero no se acerca al destape de la Marlen. Fue le peak más alto que hemos tenido: sobre 35 puntos. Allí hay también un tema interesante para debatir: ese capítulo fue más visto por mujeres que hombres. Las mujeres quieren ver a otras chilenas para compararse, para ver qué dicen, cómo lo hacen".

¿Qué otras novedades trae este ciclo?
"Vamos a mantener lo que hemos hecho hasta ahora: la comedia picaresca, con un buen elenco y buena puesta en escena. Pero también vamos a entrar en el área chica de la infidelidad, en esos temas que ocurren puertas adentro y que no siempre se hablan", dice Díaz en alusión a un capítulo que abordará la relación de un suegro con su nuera.

"La infidelidad es un drama", continúa. "Sin embargo, nosotros optamos por contar la parte divertida. En ningún caso vamos a entrar en el tema del incesto, por ejemplo. Pero si en las relaciones que se dan entre familiares políticos, el primo con la prima lejana, el suegro que se tentó con la nuera, el cuñado con la cuñada. Y lo hacemos como una forma acercarnos al público que nos ve. Para que la gente se sienta identificada. Yo me sé varias historias del primo con la prima, del cuñado con la cuñada, son cosas que pasan. Pero antes no entrábamos en esos temas, o si no, los veíamos desde la óptica más clásica".

¿Por qué no? ¿Había restricciones editoriales?
"No, pasaba por un tema de madurez. Como equipo, queríamos tener la madurez suficiente para enfocarlos y para demostrar que detrás de estos temas, que para alguien puede parecer escabroso, se esconde una realidad. Para la sociedad chilena esos temas son tabú. Por algo no se habla de ellos. Nosotros no estamos inventando nada, no estamos ficcionando. Antes no lo hicimos, básicamente, porque queríamos tener la madurez suficiente entre guionistas y con el equipo realizador, con los actores; que entendieran que el tema es divertido pero también es serio".

¿Por que siempre optar por el humor y no mostrar el lado dramático de la infidelidad? En Chile tenemos muchos casos de crímenes pasionales producto de la infidelidad.
"La infidelidad es fuerte. Hay dos puntos: cuando yo te cuento que fui infiel, te lo cuento con lujo de detalles y te ríes del drama. Si te lo cuenta el que fue engañado, a lo mejor vas a llorar con él. Por una opción de línea editorial, empatizamos con la infidelidad desde lo divertido, desde la parte más lúdica. Me carga esa palabra, pero tratamos de llevar a la pantalla los cuentos de infidelidad que todo el mundo cuenta. Es bien terrible finalmente la infidelidad. Para el que fue engañado o engañó, se echó una culpa en cima. Pero al final del día, todos nos reímos".

EL COMENTARISTA OPINA
¿Cómo puedo ser parte del Comentarista Opina?