Familiares del difunto cantante dijeron que los cuatro años que Murray podría pasar entre rejas, serían una ''palmadita en la muñeca''.
APLOS ANGELES.- La investigación sobre la muerte del cantante Michael Jackson podría estar llegando a su final, según informó hoy el diario "Los Angeles Times". La publicación, que consultó a las autoridades, cree que tan pronto como esta semana podría llegarse a una conclusión sobre el fallecimiento del intérprete de "Thriller".
Asimismo, el sitio web especializado TMZ precisó que la fiscalía del distrito de Los Angeles podría presentar hoy los cargos en contra del médico personal de "Jacko", Conrad Murray.
Ed Chernoff, abogado del doctor, aseguró ayer que su cliente está dispuesto a ponerse a disposición de las autoridades en caso de que presenten una acusación en su contra.
El letrado añadió que de momento no tiene informaciones concretas sobre una eventual acusación esta semana, pero "de suceder, está claro que él (Murray), está dispuesto a comparecer", señaló.
Además, el rotativo de California destaca que la llegada de Murray a Los Angeles desató fuertes especulaciones sobre una posible acusación formal de homicidio imprudente contra el médico por parte de la fiscalía.
Murray, que ejerce como cardiólogo en Houston, Texas, reside actualmente cerca de Los Angeles, donde también vive su hijo y donde se reúne de forma periódica con sus abogados, según explicó Chernoff.
Por su parte, la familia del difunto cantante aseguró a través de su abogado, Brian Oxman, que dichos cargos, por los que Murray podría pasar un total de cuatro años entre rejas, serían el equivalente a una "palmadita en la muñeca" para el profesional.
Oxman dijo en el show de televisión "The Early Show" que Murray había sido imprudente al suministrarle medicamentos fuertes para el insomnio al cantante. El letrado advirtió que intentaría acusarlo de asesinato en segundo grado y no homicidio imprudente ya que este último sólo le acarrearía cuatro años en prisión.
"Esto es como una palmadita en la muñeca, una bofetada en la cara, porque Michael Jackson era alguien que sabíamos que estaba en peligro de caer de rodillas, de caer muerto con el uso de estos medicamentos", señaló Oxman.
Otro de los abogados de Murray, J. Michael Flanagan, no quiso confirmar las informaciones sobre un cargo de homicidio imprudente. Tampoco la portavoz de la fiscalía se mostró dispuesta a dar más detalles. "En el momento adecuado se anunciarán", dijo Sandi Gibbons al diario.
Tras la muerte de Jackson el pasado 25 de junio, Murray reconoció haberle suministrado fuertes medicamentos, entre ellos el anestésico Propofol.
El cardiólogo comenzó a trabajar para Jackson meses antes de los conciertos "This is It" en Londres que iban a comenzar poco después de que el cantante falleciera y residió junto a "Jacko" en una mansión alquilada en un exclusivo barrio de Beverly Hills.
Según la autopsia, Jackson murió de una sobredosis aguda de Propofol.