La hacienda San José del Carmen de El Huique, es un Monumento Histórico Nacional que fue afectado por el terremoto pasado.
El Mercurio.SANTIAGO.- Un urgente y preocupante llamado realizó el Comité de Patrimonio Arquitectónico y Ambiental del Colegio de Arquitectos, tras observar que se han demolido deliberadamente algunos inmuebles patrimoniales que fueron afectados por el terremoto del 27 de febrero pasado.
Según un comunicado oficial difundido hoy, la entidad ha puesto la voz de alerta a las autoridades, "enfrentándose a las decisiones de los municipios de demoler construcciones patrimoniales sin el debido estudio sobre su posible reparación, perdiéndose valiosos inmuebles patrimoniales".
De acuerdo a lo informado por la arquitecto e integrante del comité, Marjolaine Neeli, han tenido varias instancias para recorrer las regiones que fueron más afectadas y también otras reuniones para coordinarse y realizar un diagnóstico general, como con el Episcopado la semana pasada y el Centro Nacional de Rehabilitación Patrimonial.
"Hay colegas arquitectos que están trabajando como voluntarios y también las universidades a las cuales el Colegio está coordinando a petición del Ministerio de Vivienda. Muchos arquitectos han acudido a petición de familiares y también personales", explicó Neeli.
A partir de ello, el Colegio de Arquitectos ha enviado un informe de contingencia a varias direcciones de obras municipales que están en las principales zonas afectadas de la V, VI, VII, VIII y IX regiones, además de la Región Metropolitana.
Políticas para conservar patrimonio
En la declaratoria enviada por el comité a los municipios, se especifican las políticas y criterios prioritarios para conservar y recuperar el patrimonio arquitectónico y urbano afectado luego de la catástrofe natural que sucedió hace más de dos semanas.
Entre los ocho puntos expresados, se destaca que toda construcción declarada como Monumento Histórico o Inmueble de Conservación Histórica "deberá ser recuperada o reconstruida al estado anterior al terremoto, no obstante el costo y el tiempo que ello pudiera demandar".
Además, los inmuebles que estén en una Zona Típica o de Conservación Histórica deberán evaluarse y estar bajo las normas que rigen la Ley de Monumentos Nacionales y la Ley de Urbanismo y Construcciones.
El comunicado señala que toda construcción es recuperable y si aún no hay recursos públicos para mejorarla, "deben protegerse en su estado actual, aislándolas para evitar posibles riesgos de vidas humanas y resguardándola de las inclemencias climáticas".
"Sólo debe demolerse si existe peligro de derrumbe y en situación de colapso parcial o total. Ello debe hacerse con los mayores cuidados posibles, tanto con los elementos de construcción como también con los de decoración y bienes muebles", concluye el documento, indicando que en vez de demolerse, debe "desarmarse".