La película de Mijalkov estará presente en el Festival de Cannes.
Studio Trite
MOSCÚ.- La nueva cinta monumental del reputado cineasta ruso Nikita Mijalkov estaba llamada a convertirse en el acontecimiento del año en Rusia, pero se está revelando como un auténtico fiasco, según informan hoy los medios moscovitas.
La secuela de "Quemado por el sol" (1994), que se hizo con el Oscar a la mejor película de habla no inglesa, no consigue atraer a la gente a los cines, pese a su gigantesca campaña publicitaria, y las salas donde se proyecta se ven medio vacías.
El diario "Moskovski Komsomolez" se indigna de que ahora, incluso los profesores de la ciudad de Vladivostok obliguen a sus alumnos a ir al cine, pagándoselo ellos mismos.
"Quemado por el sol 2: Éxodo", que competirá en unas semanas en el Festival de Cine de Cannes, es una superproducción sobre la Segunda Guerra Mundial con un presupuesto de 41 millones de euros (54,6 millones de dólares).
Conocido por su proximidad al gobierno, Mijalkov tuvo el infrecuente honor de estrenar el filme en el Kremlin. Al igual que en otras de sus películas, también en esta ocupa él mismo el papel principal, y reservó otro para su hija Nadeshda.
En una carta abierta al presidente ruso, Dmitri Medvedev, publicada en la portada del diario "MK", el articulista Alexander Minken expresa su indignación por el envío de estudiantes de primaria a ver esta "orgía de sangre" con un lenguaje inadecuado para los jóvenes. Al parecer, el ayuntamiento de Vladivostok emprendió la iniciativa alegando la "eduación patriótica" de sus alumnos.
Los críticos cinematográficos rusos llevan días atancando el filme, cuya tercera parte se estrenará en el segundo semestre. Para su paso por Cannes, la cinta tuvo que ser recortada de tres a dos horas. Según dijo en una entrevista el experto Oleg Soltarjov, Mijalkov ya no es tomado en serio por sus compatriotas, que lo consideran más bien un funcionario del cine.
