El portavoz aseguró que hay muchos ''rumores'' respecto a la resolución del caso, pero aclaró que todos son falsos.
AP
GINEBRA.- La decisión sobre la extradición del cineasta Roman Polanski, a quien Estados Unidos quiere juzgar por relaciones sexuales con una menor hace 33 años, está "en su última fase" y "aún no ha sido tomada" aseguró hoy un portavoz de la Oficina Federal de Justicia (OFJ) de Suiza.
En las últimas 24 horas se han multiplicado las informaciones de medios de prensa que aseguran que Suiza habría aprobado la extradición de Polanski, detenido con fines de extradición el pasado septiembre en Zúrich a petición de la Justicia estadounidense.
El portavoz de la OFJ, Rudolf Wyss, aseguró a la agencia de noticias EFE que se trata de "rumores" y garantizó que no hay ninguna decisión tomada sobre Polanski en uno u otro sentido.
El problema, explicó, es que un medio de prensa "malinterpretó" el comentario de otro portavoz de la entidad, quien se refirió a que "el caso (de Polanski) estaba maduro".
Wyss dijo que, en efecto, el estudio de la demanda de extradición del cineasta franco-polaco se encuentra "en su última fase", pero declinó dar alguna indicación sobre cuánto tiempo más podría durar su evaluación. "Todo depende de la complejidad del caso", comentó.
Asimismo, Wyss indicó que, en caso de que la decisión sea desfavorable a Polanski y se apruebe su extradición, su defensa tendría la posibilidad de recurrir en un plazo de 30 días ante el Tribunal Penal Federal de Bellinzona, máxima instancia judicial de Suiza.
Tras su detención, Polanski pasó dos meses en una prisión suiza, tras lo cual las autoridades le autorizaron a esperar una una decisión final bajo arresto domiciliario, que cumple desde hace siete meses en una residencia que posee en la localidad de Gstaad, una exclusiva estación de esquí.
Desde entonces, el reconocido cineasta ha recibido muestras de solidaridad, particularmente de figuras de la política y del mundo del arte francés.
Estados Unidos insiste en su extradición para juzgarle por haber mantenido relaciones sexuales en 1977 con una adolescente de 13 años, a la que supuestamente drogó.
Polanski llegó años después a un acuerdo económico con la joven y su familia, la que retiró todos los cargos y se pronunció públicamente por el cierre definitivo del caso, pero los jueces estadounidenses consideran que el delito no ha prescrito y debe ser juzgado.
