Carolina Nissen

El debut de la compositora valdiviana Carolina Nissen -y que puede descargase gratis desde internet- es un clásico álbum de piano-rock. Y en un país que siempre fue de guitarras, eso sorprende. No tanto por el instrumento en sí, sino por las posibilidades armónicas que le da a las canciones. ¿Qué podemos hacer si no hay distorsión ni efectos? Melodías. Pensemos que en Argentina al menos tres figuras de la música popular son escencialmente pianistas: Charly García, Calamaro y Fito Páez.

Pero este disco, a diferencia de Muerdete la lengua (2007) de Francisca Valenzuela, otro debut protagonizado por el piano, acá no hay rabietas post-adolescentes. Tampoco ese ingenuo despecho rockista -algunos llaman "actitud"- que arruinaba un poco la obra de Valenzuela. Acá están implícito cierto paisaje emocional no-santiaguino: la pieza como centro de operaciones, nostalgia del sol, cierto tono reflexivo. Una propuesta narrativo-musical ciertamente distinta a la juerga permanente y callejera de lanzamientos recientes como Odisea o Miss Garrison.

Basta remitirse a "Pienso en ti" y la cadencia casi didáctica con que la protagonista reconoce su tristeza. O cuando entran las plumillas en mitad de "Miedo", con una sutileza digna del gran Ben Folds (referente del piano-rock como subgénero). O la excelente comunión de percusión y piano en la marchante "Guindo". Pero también hay algunas incursiones de guitarras acústicas y cierto aire folky que recuerdan al primer Belle & Sebastian: "Cada vez que te vas" o "Todo en su lugar".

La gran paradoja es que un buen debut corre el riesgo de perderse entre decenas de nuevos discos que también entienden lo urgente que es tener buenas melodías, canciones al grano y estribillos que hacen apretar "repeat" en el reproductor de mp3. Cuesta creer que apenas algunas bandas como Los Tres, Lucybell o Chancho en Piedra lo hicieron en los '90, cuando primaba la exhibición técnica y el funk. ¿Cómo hacer trascender esta obra en el océano de myspaces y blogs "melómanos"? Al menos Carolina Nissen ya está empezando a sonar en Radio Uno.

—JC Ramírez Figueroa