Yes llega a Chile sólo con rock sinfónico: "El talento del grupo no consiste en escribir hits"

SANTIAGO.- Más que una gira con todos los grandes éxitos es una vuelta a las raíces la que anuncia el guitarrista Steve Howe, a propósito del show que la veterana banda inglesa de rock sinfónico Yes dará esta noche en el Teatro Caupolicán en Santiago.

Aunque el grupo funciona sin su cantante histórico y fundador, Jon Anderson, alejado hace dos años, el repertorio de la actual gira de Yes consiste precisamente en el masivo contingente de rock sinfónico y progresivo que el grupo grabó sobre todo entre 1971 y 1978, recreado por la actual formación del grupo.

Sinfónico y progresivo

Dos integrantes nuevos y tres históricos tocan en Yes hoy: Benoit David (voz), Steve Howe (guitarra), Oliver Wakeman (teclados), Chris Squire (bajo) y Alan White (batería).

Chris Squire es el hombre que fundó el grupo en 1968 junto a Jon Anderson, y Howe y White se unieron en 1970 y 1972. El nuevo tecladista es hijo de Rick Wakeman, otro miembro histórico, y el más reciente es el cantante, Benoit David.

En cuanto al repertorio, Howe, de 63 años, enfatiza que el grupo se enfocará sobre todo en sus raíces en el rock sinfónico, marcado por composiciones de sus primeros discos y de largo aliento como "I've seen all good people" (1971) o "And you and I" (1972).

-El talento de Yes no consiste en escribir hit singles, no somos ese tipo de grupo y jamás habríamos llegado a ninguna parte así. Creo que el legado de Yes tiene mucho más que ver con los '70 -dice Steve Howe, de 63 años (ver la entrevista en detalle) en contraposición a la época ochentera en la que el grupo tuvo sus mayores impactos radiales.

Es el período marcado por éxitos como "Owner of a lonely heart" (1983), "Lowe will find a way" (1987) o "The rhythm of love" (1987), en los años en que Steve Howe fue sustituido por el guitarrista sudafricano Trevor Rabin, entre otros cambios de integrantes.

-¿Ahora no siente a esas canciones como parte de la historia de Yes?
-Bueno, no sé qué decir, porque estaba en Asia en ese momento -dice, y no se refiere al continente asiático sino a la superbanda de rock progresivo que integró con músicos provenientes de grupos del mismo género como King Crimson y el trío Emerson, Lake and Palmer-. Pero tenía la impresión de que Yes se había vuelto una banda típica. Digamos semi-progresiva, porque sobre todo se transformó en un grupo de rock y pop.

"Para mí fue doloroso por un tiempo ver a Yes tocando esa clase de música", continúa, "hasta que finalmente me acostumbré y lo acepté como algo normal. Creo que hay buenos elementos de Yes en algunas de las canciones de esa época también; hubo un guitarrista distinto, desde luego, tratándose de Trevor Rabin. Pero finalmente entendí que, qué diablos, tenía que dejarlos ir, les deseé suerte e hice mis cosas".

Hoy, luego del paso de más de quince integrantes por las filas de las bandas en sus cuarenta y dos años de historia, Howe es el segundo más veterano a bordo de Yes junto al bajista Chris Squire. "Ahora Yes es otra responsablidad", distingue el guitarrista. "Porque Trevor Rabin ya no está. Tony Kaye no está, Jon Anderson no está, Rick Wakeman no está, Patrick Moraz no está. De lo que se trata con Yes ahora es de reproducir algo, reproducir la gran música que Yes hizo en los años '70".

-Son justamente los años en los que se acuñó el llamado rock progresivo. ¿Le cae bien ese rótulo?
-Sí, sí. Bueno... una pera es una pera, you know; un plátano es un plátano. Pero el rock ha tenido tantas categorías distintas. Está el rock viejo (Howe se pone a cantar a capela una versión del rocarol "Rock around the clock", de Bill Haley); y nadie quiere escuchar eso ahora. Es agradable oírlo de vez e cuando, pero ésa no es música de hoy. En los últimos cuarenta o cincuenta años la música no ha dejado de cambiar y eso es fantástico.