No sólo hay música en el horizonte de este grupo chileno. Hay bibliografía también. Y más que las lecturas, lo determinante para Cocodrilos con Martini son las portadas de los libros, y con más precisión las de cierta colección de novelas policiales llamada "El Séptimo Círculo" y creada en los años '40 por los autores argentinos Jorge Luis Borges y Adolfo Bioy Casares para la editorial Emecé.
Esas son portadas diseñadas por el ilustrador José Lucio Bonomi, y Bonomi es el inspirador si los hay de la historia de Cocodrilos con Martini. Porque este combo iniciado en 2008, que el sábado lanza su primer disco en el cada vez más recurrente Centro Gabriela Mistral de la capital (ver recuadro), tiene que ver con música y con argumento al mismo tiempo, con personajes y una serie de dibujos animados que corre en paralelo a la banda sonora orquestada por el grupo.
Vicente García-Huidobro (voz y guitarra), Marcelo Bravo (teclados), Rodrigo de Petris (piano, saxo tenor y coros), Alejandro Fuentes (bajo) y Cristián Bidart (batería) son los músicos, y Cocodrilos con Martini Vol. 1 es su disco debut. Y si tres de los integrantes –García-Huidobro, De Petris y Bidart– han pasado por las filas del grupo de rock y fusión Akinetón Retard, lo primero es marcar la diferencia con Cocodrilos con Martini, cuya música es más cercana a la canción y más alejada de los experimentos pelacables propios de Akinetón.
-En general no me estoy deteniendo a pensar en cuán perturbadores o pelacables sean los proyectos en los cuales me embarco -considera García-Huidobro, quien además es el compositor de la música de Cocodrilos con Martini-. Pero efectivamente a nivel de forma musical esto es mucho más convencional que Akinetón Retard, lo cual no es muy difícil. Me pone muy contento haber logrado una sonoridad radicalmente distinta a lo que venía haciendo con antelación. Aunque te aseguro que al ver el show de Cocodrilos con Martini hay momentos profundamente hermosos seguidos de espacios de alta perturbación, de los cuales ni Sernatur ni particularmente el Sernam se sentirían orgullosos.
Subyace un thriller policíaco y suburbano
Ha habido movimientos en los dos años de vida del grupo. Por lo pronto la población de Cocodrilos era mayor al comienzo, con Vicente García-Huidobro (voz y guitarra), Rodrigo de Petris (piano y saxo), Marcelo Bravo (teclados), Sebastián Carrasco (trompeta), Edén Carrasco y Alejandro Rivas (saxos), Alejandro Fuentes (bajo), Cristián Bidart (batería) y DJ Vaskular (tornamesas).
Ahora el grupo decantó en García-Huidobro, De Petris, Bravo, Fuentes y Bidart. Lo que no quiere decir que el cocodrilo con martini sea una especie en vía de extinción, aclara el guitarrista. Para el lanzamiento el grupo será acompañado por la cantante Vanessa Silva y va a tocar la gran mayoría de su flamante disco, además de canciones inéditas. "Quizás guardadas para un segundo disco, o para síngols y jíngols, en caso de ser pertinente", dice el guitarrista.
-¿Qué pasó con Carrasco, Carrasco, Rivas y Vaskular en el camino? ¿No fueron nominados por el técnico?
-Esa "reducción" orquestal se ha producido por varias razones -explica el guitarrista, cuya primera intención era formar una banda al estilo soul, como Dap Kings o Amy Winehouse: quinteto de rock, tres vientos y un DJ-. A poco andar nos dimos cuenta de que era un desgaste alto ser un proyecto nuevo y girar en forma dúctil con un colectivo tan grande. De hecho en algunos lugares casi no cabíamos en el escenario. Si le sumamos que nuestra tendencia natural es el rock, que los vientos han sido materia central en otros proyectos que he tenido y que todos los músicos señalados son de primer nivel y muy ocupados, llegamos a este "nuevo orden", el cual nos tiene muy motivados.
-Al revés de los otros "proyectos" anteriores que mencionas, ¿Cocodrilos con Martini es más que un grupo, es una historia completa?
-Cocodrilos propone un marco estético sustentable y cada vez más autoadministrable. Tomando como punto de partida las portadas de la colección "El Séptimo Círculo", en particular el trabajo de José Bonomi, subyace un thriller policíaco y suburbano. Pero ante todo Cocodrilos con Martini es un quinteto que ha compuesto, experimentado y grabado mucho material. Cocodrilos con Martini es la banda sonora de un programa que aún no existe.
-A propósito de banda sonora, "canciones y músicas incidentales", dice el anuncio del concierto. ¿Cómo se relacionan las canciones y las músicas incidentales en el grupo?
-De manera muy natural. Cuando el nivel de saturación en los contenidos empieza a desbordarse, relajamos el ambiente con algún tema incidental o algo que desvíe el foco de la atención hacia otra parte. Cocodrilos con Martini está diseñado para mutar y provocar diversas sensaciones en un concierto. No es lineal en ese sentido.
-¿Y cuál es la experiencia actoral a la que han aludido?
-No tenemos formación teatral en términos convencionales, pero hemos tenido la suerte de trabajar como músicos de teatro y de conocer por dentro el profesionalismo y compromiso de grandes compañías, actores y directores. Sin duda que esa experiencia nos ha marcado y ayudado a pararnos en el escenario.
Más cercano al Triángulo de las Bermudas
Luego de su inicio en 2008, Cocodrilos con Martini grabaron sus primeras canciones con Diego Bustamante, ingeniero de los últimos discos de Akinetón Retard y del programa "Catedral en Coma", larga saga de emisiones musicales en vivo animada por Vicente García-Huidobro en radio Horizonte. En una segunda instancia convocaron a Luis Tata Bigorra, hombre con experiencia como baterista de Los Tetas y Funkattack y como productor de discos de cantantes como Mariel.
-Llama la atención el sonido algo caribeño de canciones como "Babao", "Cool & Garth", "Refractasound". ¿Cocodrilos con Martini se sienten mejor en aguas cálidas?
-"Babao" es el último tema que grabamos y el primero en ser escrito para Cocodrilos con Martini. Lo caribeño apareció en la sala de ensayo, variando y especulando en torno al acompañamiento de la melodía. Responzabilizo al señor Bidart (el baterista) y al señor Fuentes (el bajista) por esa veta en particular. "Refractasound" es nuestro primer síngol. Era mucho más reggae en su versión original, pero la producción musical del Tata Bigorra lo llevó a otro lugar. Más cercano al Triángulo de las Bermudas.
-¿De hecho qué efecto tuvo producir el disco con Tata Bigorra?
-Un cambio absoluto. Llamé al Tata para que me diera otra perspectiva de nuestra música y fue logrado con creces. Hay detalles en discos que admiro como el Reality, de Bowie; Sea change, de Beck, y Love below, de OutKast, por nombrar algunos entre millones, que tienen transiciones muy logradas entre las distintas secciones e ideas. El Tata creó esos puentes y dio un sonido aun más particular a los Cocodrilos. De hecho trabajamos tan armónicamente que este año creamos el sello Breakmotiv, estudio de grabación y creación de contenidos varios, como animación, diseño, guiones y composición musical. Y no puedo dejar de mencionar a Chalo González su aporte en la masterización.
-¿"Tendencias" es como la canción de los títulos de Cocodrilos con Martini? ¿Te imaginas la historia como una serie, a lo "Hawai 5-0" o "Las calles de San Francisco"?
-Si, algo así... Me imagino a Cocodrilos con Martini como un programa de televisión y "Tendencias" abre el disco como introducción, con De Petris en su faceta mas policíaca.
Y la saga animada completa el despliegue multidisciplinario del grupo. Se trata de un trabajo del ilustrador Andrés Rodríguez, también llamado Androp, en estrecho contacto con el propio García-Huidobro.
-¿Qué fue primero en Cocodrilos con Martini? ¿La historia o el grupo? ¿El dibujo animado o el músico de carne y hueso? ¿El huevo o el cocodrilo?
-Lo primero es un sentido de búsqueda agudizado por el hecho de vivir en Santiago: está claro que la experiencia Cocodrilos está cruzada por esta circunstancia. El proyecto está en constante mutación, pero está marcado por el dockerismo, por el terracotismo y por pequeñas fracturas emocionales perennes.
-Finalmente ¿cómo se relaciona Cocodrilos con Martini con otros emprendimientos tuyos? Por ejemplo el grupo Chongo Mongo entre 1999 y 2004 o los programas "Catatonios y akrananios" en la radio de la Chile entre 1998 y 2001, o "Catedral en coma" y "Safari urbano"? ¿Alguna relación?
-Sí, definitivamente todo tiene relación. Creo que estoy armando un puzzle en forma bastante paciente y a nivel colectivo nos estamos preparando para juntar las piezas correctamente cuando sea el momento.
-¿En el fondo un programa de radio y un grupo musical son vehículos para decir cosas parecidas?
-Lo dejaría en un vehículo para decir cosas. Son verdaderos Pathfinders de la libertad expresiva.