MADRID.- La ciudad estonia de Tallin prepara sus galas para celebrar mañana los Premios del Cine Europeo, que con Roman Polanski como favorito por
"El escritor oculto" ("The Ghost Writer"), puede tener también acento latinoamericano con el documental chileno
"Nostalgia de la luz" y la cinta hispanoargentina
"El secreto de sus ojos", que puja por el máximo galardón.
El documental
de Patricio Guzmán, una coproducción con Francia y Alemania, funde la astronomía con la memoria histórica, y opta al premio en su respectiva categoría. La cinta ya
fue distinguida en el Festival de Cannes y fue
celebrada por la prensa extranjera.
La cinta de Juan José Campanella, en tanto, ya logró el Oscar como mejor película de habla no inglesa el pasado febrero representando a Argentina, pero ha conseguido con su "doble nacionalidad" pujar también por la victoria en la gran fiesta del cine europeo.
El castellano también se hablará gracias a
"Celda 211", nominada al mejor actor (Luis Tosar) y al mejor guión, así como en la categoría de filme de animación, donde parte como favorita
"Planet 51", de Jorge Blanco, y en la de dirección artística "Io, Don Giovanni", de Carlos Saura.
Las miradas están puestas, no obstante, en la posibilidad de la victoria de un ausente: Roman Polanski que, con siete candidaturas entre las que están mejor película, director, guión y actor (Ewan McGregor), no podrá acudir a Estonia, país que, al igual que Suiza donde fue detenido hace un año, tiene acuerdo de extradición con Estados Unidos.
"El escritor oculto", su elegante thriller político rodado en Gran Bretaña, le reportó el Oso de Plata en el pasado Festival de Berlín, pero se juega la revancha con la gran ganadora del certamen, la turcoalemana "Bal" ("Miel), de Semih Kaplanoglu, que opta a tres premios importantes: película, director y fotografía.
No en Berlín sino en Venecia ganó "Lebanon", producción entre Israel, Francia y Alemania dirigida por Samuel Maoz que opta a cinco premios y que narra 24 horas en la vida de un grupo de jóvenes soldados en el interior de un tanque durante la primera guerra de este país, en 1982.
La categoría de mejor película la completan la historia de convivencia religiosa entre cristianos y musulmanes en "Des hommes et des dieux", del francés Xavier Beauvois, y la comedia ligera, sabrosa y rítmica de Fatih Akin
"Soul Kitchen", de nacionalidad alemana.
Entre estilos interpretativos tan diferentes como los de Ewan McGregor y Luis Tosar, el premio al mejor actor también podría recaer en el danés Jakob Cedergren por la nueva película de Tomas Vinterberg, "Submarino"; el italiano Elio Germano por "La nostra vita" y el joven actor rumano George Pistereanu por "If You Want to Whistle, Whistle".
Entre las mejores actrices, destacan la francesa Sylvie Testud por interpretar a una impedida física que se abre a la posibilidad del milagro en "Lourdes", y la británica Lesley Manville por el filme de Mike Leigh "Another Year", en una terna completada por la holandesa Lotte Verbeek ("Nothing Personal"), la croata Zrinka Cvitesic ("Na putu") y la alemana Sibel Kekilli ("Diem Fremde").
Para el premio al mejor director, además de Polanski, Maoz y Kaplanoglu, aparecen Olivier Assayas por su filme de cinco horas "Carlos", aplaudido en Cannes, y el italiano Paolo Virzi por "La prima cosa bella". Y, finalmente, el premio a toda una carrera será para el actor alemán Bruno Ganz, conocido internacionalmente por dar vida a los últimos días de Adolf Hitler en "Der untergang".
Estos premios, que otorga la Academia del Cine Europeo, nacieron en 1988 con la intención de convertirse en "los Oscar del viejo continente" -en un principio se llamaban "Felix"- e impulsados por dos popes como Ingmar Bergman o Wim Wenders.
Desde entonces, cineastas de impacto internacional como "Breaking the Waves", de Lars Von Trier, "La vida es bella" ("La vita è bella"), de Roberto Beningni, "Todo sobre mi madre", de Pedro Almodóvar, o "Amélie", de Jean Pierre Jeunet, se han coronado con el máximo galardón, que el año pasado recibió
"La cinta blanca" ("Das weisse Band"), de Michael Haneke.