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Mario Vargas Llosa cuestiona las democracias de Venezuela y Bolivia en su discurso del Nobel

El escritor habló de literatura y política, las dos grandes esferas que han marcado su vida, en la conferencia que antecede a la recepción del galardón en la Academia Sueca.

07 de Diciembre de 2010 | 16:31 | AP / DPA
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El escritor llamó a defender la democracia liberal, en otra de sus alusiones políticas.

AP

ESTOCOLMO.- El premio Nobel de literatura Mario Vargas Llosa elogió a América Latina el martes por la expansión de la democracia, durante el discurso que antecede a la recepción del galardón que entrega la Academia Sueca.

En la conferencia, el novelista peruano dijo que "por primera vez en nuestra historia, tenemos una izquierda y una derecha que, como en Brasil, Chile, Uruguay, Perú, Colombia, República Dominicana, México y casi todo Centroamérica, respetan la legalidad, la libertad de crítica, las elecciones y la renovación en el poder".

"Padecemos menos dictaduras que antaño, sólo Cuba y su candidata a secundarla, Venezuela, y algunas seudodemocracias populistas y payasas, como las de Bolivia y Nicaragua", añadió sin filtro.

En la ocasión, y en una sala abarrotada de visitantes, el escritor además se refirió a sus grandes temas, en una emotiva intervención ante un auditorio que hablaba mayoritariamente español, por primera vez en 20 años.

"Me gustaría que mi madre estuviera aquí", fueron algunas de las primeras palabras del novelista al empezar su conferencia titulada "Elogio de la lectura y la ficción", pronunciada en español y que constituye uno de actos que más atención mediática despiertan todos los años en la capital sueca.

En el recinto de la Academia Sueca, ubicado en Gamla Stan, la Ciudad Vieja de Estocolmo, Vargas Llosa evocó con ternura a su familia y su infancia en Bolivia y Perú, ante los ojos de su esposa, Patricia, y sus tres hijos, Álvaro, Gonzalo y Morgana.

Después de rendir homenaje a sus grandes maestros —el francés Gustave Flaubert y el estadounidense William Faulkner, entre otros—, el flamante Nobel de Literatura desgranó lo que ha convertido desde hace años en su manera personal de entender su oficio, especialmente marcada por el compromiso político y social.

"Igual que escribir, leer es protestar contra las insuficiencias de la vida", señaló el literato, algo disfónica por un resfriado. "Sin las ficciones seríamos menos conscientes de la importancia de la libertad".

Tras su discurso de hoy, el novelista recibirá el viernes la medalla y el diploma del máximo galardón literario en una ceremonia festiva en la Sala de Conciertos de Estocolmo. El premio tiene una dotación de 10 millones de coronas suecas (casi 1,5 millones de dólares).