Llega a Chile la película de Lady Di que generó polémica en el Reino Unido

SANTIAGO.- Era una de las películas más esperadas del año en el Reino Unido, pero se terminó convirtiendo en una de las más polémicas. "Diana" se estrenó a fines de 2013 rodeada de una intensa campaña publicitaria que, debido a la naturaleza de su protagonista, prácticamente no requirió de mayores impulsos por parte de los estudios que la llevaron a cabo.

La cinta se anunció como una producción biográfica centrada en los últimos dos años de vida de Lady Di —encarnada por la australiana Naomi Watts— y lo haría enfocándose en su romance con un médico pakistaní, Hasnat Khan, quien aquí es interpretado por Naveen Andrews (recordado por su papel como Sayid en "Lost").

La historia fue sacada del libro biográfico de Kate Snell "Diana: su último amor" (2001), en el cual se postula la teoría de que Diana de Gales comenzó a salir con Dodi Al Fayed sólo para provocar celos en Khan. La adaptación de esta publicación fue ejecutada por el cineasta Oliver Hirschbiegel, cerebro de la película sobre los últimos días de Hitler, "La caída".

El carácter romántico de la película generó expectativas, debido a que supuestamente iba a revelar hechos desconocidos para la audiencia, la que siempre demostró interés en la vida personal de la ex esposa del príncipe Carlos de Inglaterra.

Tras el debut de la película en el Reino Unido, las miradas se fueron hacia el Palacio de Buckingham para observar las reacciones de la familia real. Pero ni la Reina Isabel II, ni sus hijos, ni los príncipes William y Harry, expresaron públicamente una opinión sobre la cinta.

Los que sí lo hicieron fueron los críticos y la prensa, los cuales iniciaron una polémica semanas antes del estreno, debido a que cuestionaban la prudencia de la historia. La más expuesta y vulnerable en este proceso fue la actriz Naomi Watts, quien otorgó una serie de entrevistas para hablar de la producción. En una de ellas, publicada por el "Sunday Times", dijo que la reacción de los hijos de Diana era relevante para ella. "Me preocupo profundamente por cómo se sientan los príncipes, por supuesto. Yo soy madre de dos chicos", afirmó.

Uno de los episodios más desagradables dentro de la promoción de la cinta se vivió en los estudios de la BBC. La actriz abandonó una conversación con el conductor Simon Mayo,  debido a que consideró inapropiado su contenido. "¡Naomi Watts se fue de una entrevista! Parecía muy incómoda con las preguntas. Lástima", aseguró en esa oportunidad el locutor.

Por otra parte, la crítica incrementó la polémica al lamentar que no se profundizara lo suficiente en las variantes del personaje. "El desorden emocional y motivaciones psicológicas de una compleja figura histórica son reducidos a una telenovela simplista", dijo en ese entonces Stephen Dalton, de The Hollywood Reporter, mientras que Charles Gant, de "Variety", aseguró que el guión "cae en la torpeza".

La ola de comentarios sobre la película influyó en su popularidad cuando llegó a los cines, lo cual la llevó a convertirse en un éxito de taquilla. Generó ingresos por 332 millones de dólares, y sólo se rodó con 68 millones.