LA PAZ.- Bolivia alienta una pronta solución al diferendo con Chile por el uso de las aguas del manantial del Silala, anunció el Presidente Hugo Banzer, durante un encuentro con un grupo de corresponsales extranjeros.
El Mandatario boliviano consideró que el asunto del Silala no debería entorpecer un diálogo global entre ambas naciones sobre problemas históricos y estimó que esta nueva controversia debería resolverse por entendimientos empresariales o por un arbitraje.
El impasse surgió cuando el gobierno de Bolivia expresó esta semana su apoyo a la empresa Ductec, que denunció a la Corporación Nacional del Cobre de Chile (Codelco) y a la chilena Empresa Ferrocarril Antofagasta Bolivia, por rehusar el pago por el aprovechamiento de los recursos de la vertiente andina del Silala.
La Moneda sostiene que el Silala, por derivar sus aguas a Chile por una centenaria canalizacion -hecha en virtud de una concesion boliviana revocada en 1997- es un rio internacional y por tanto un recurso compartido.
Bajo ese argumento, Santiago desconoció la concesión otorgada por La Paz en abril último a la empresa Ductec para la explotacion de las aguas del manantial, y ha instruido a las empresas chilenas usuarias del recurso, a no pagar por el mismo.
Las aguas del Silala abastecen, entre otras, a las ciudades de Arica, Antofagasta, Iquique y Taltal, además de Chuquicamata, la mina de cobre a tajo a abierto más grande del mundo controlada por Codelco, uno de los principales puntales del erario nacional chileno.
Bolivia y Chile, los únicos países latinoamericanos que carecen de relaciones diplomáticas, interrumpidas desde 1978, se enfrentaron en 1879 en una guerra que privó a la primera de 120.000 km2 de territorios, incluidas sus costas al Océano Pacífico.
