SANTIAGO.- Escenas de profundo dolor se vivieron en el cementerio el Prado, ubicado en la comuna de La Florida, lugar en el que fueron depositados los restos de la pequeña de 7 años, Nerea Villouta, quien falleció ayer debido a los brutales golpes que recibió por parte de su padrastro, Juan Arancibia.
El padre de la menor, Jorge Villouta, a pesar de encontrarse visiblemente afectado, con gran entereza acompaño a su hija hasta que el cuerpo de la menor fue depositado en la tierra.
La familia de la madre de la niña, su hermana Lucero y el conviviente, en cambio, continúan desaparecidos.