SANTIAGO.- Junto con asegurar que se están haciendo todos los esfuerzos posibles para despejar las vías públicas ocupadas por los microbuseros, el ministro del Interior, José Miguel Insulza, afirmó que el Gobierno no cederá ante las presiones de los empresarios de locomoción colectiva.
"Quiero asegurarles que aquí no va a ver ningún tipo de concesiones, las calles tienen que ser despejadas y vamos a aplicar todo el rigor de la ley en este caso", informó el secretario de Estado, quien agregó que en pocos minutos más el Gobierno dará a conocer medidas para dar término al conflicto.
Según Insulza, el Gobierno no puede prometerle a la ciudadanía que mañana no van a continuar las movilizaciones, "lo único que le podemos prometer es que se va a ser todo lo posible. La gente tiene que entender que este es un fuerte chantaje", sentenció el secretario de Estado.
Insulza explicó que ceder ahora ante la presión de los dirigentes significaría no aplicar el plan de transportes metropolitano el cual tiene como fin reducir la contaminación de la ciudad de Santiago. "Y no estamos hablando de un tema secundario", agregó Insulza.
