SANTIAGO.- Alejandra Toledo, la joven madre de 22 años, que ayer recibió un injerto de hígado de su hermano en vida, evoluciona en forma satisfactoria, según informó hoy el médico de la Clínica Las Condes Erwin Buckel.
Al ser consultado acerca de la operación de ayer, dijo que ésta "fue muy difícil, estuvimos harto rato en Pabellón, con una paciente muy inestable, en condiciones de extrema gravedad. Felizmente el hígado que le pusimos empezó a lograr recuperar a la paciente y ahora está en condiciones bastante estables", declaró a radio Chilena.
En tanto, el hermano de Alejandra, Santiago Toledo, se encuentra "en muy buenas condiciones". "No esperamos que tenga ninguna complicación ni el corto ni en el mediano plazo, así es que la recuperación de él debiera ser satisfactoria", agregó el facultativo.
Alejandra Toledo, que sufre de una hepatitis fulminante y es madre de una guagua de 6 meses de edad, recibió parte del hígado de su hermano, ya que nunca llegó el esperado donante cadáver.
Uno de los factores que dificultó el encontrar un órgano compatible es el grupo sanguíneo de María Alejandra, RH negativo, uno de los más escasos.
En la intervención se le extrajo cerca del 60 por ciento del hígado sano del donante.
Ayer por la tarde, el equipo médico del hospital Barros Luco realizó los exámenes de compatibilidad entre los hermanos, determinando que era posible llevar a cabo la doble intervención. Inmediatamente trasladaron a la paciente a la clínica Las Condes.
El médico transplantólogo, Erwin Buckel, explicó que la intervención tiene un riesgo de muerte de 30 por ciento para ambos.
Este tipo de trasplante es posible de realizar porque el hígado se regenera luego de seis a ocho semanas.
Buckel, es el mismo especialista que intervino a Anaís Araya Sánchez, de seis años, quien este martes recibió un injerto de hígado en el Hospital Luis Calvo Mackenna para restaurar su deteriorada función hepática.
