SANTIAGO.- En sesión especial el Senado despachó esta tarde el controvertido proyecto de ley que establece un nuevo concepto de Autoridad Sanitaria, como asimismo distintas modalidades de gestión, además de fortalecer la participación ciudadana.
La iniciativa aprobada con 22 votos a favor, 18 en contra y la abstención del senador Marco Aburto, determina que no habrá arriendo de salas comunes en los hospitales públicos a los afiliados a las Isapres, primando así el criterio de la Comisión de Hacienda, lo que además augura un tercer trámite más expedito en la Cámara de Diputados.
El pasado jueves 15 de enero, el Senado se vio obligado a postergar la votación de dicha ley debido al desconocimiento que manifestaron algunos senadores sobre el proyecto.
Una vez conocida la resolución del Senado el ministro de Salud, Pedro García, se manifestó contento por la votación, afirmando que el proyecto "va en beneficio de la salud pública".
Finalizada la discusión de mediodía en la Cámara Alta, que concluyó con graves incidentes y la expulsión de las tribunas de cerca de 200 personas, el presidente de la Confusam, Esteban Maturana, señaló: "Estamos asistiendo a una escena ridícula, estamos asistiendo a la venta de la salud pública. Esto de verdad es una vergüenza, esta es la muerte anunciada de la salud pública".
El proyecto de ley de autoridad sanitaria comenzó a ser discutido en marzo del año pasado en el Senado, introduciendo modificaciones radicales al sistema de salud en materia de calidad y administración, y esta tarde contó con el amplio respaldo de la Concertación y la oposición.
Puntos centrales del proyecto:
Fiscalización: Crea una superintendencia de salud que fiscalizará al Fonasa y a las isapres con las mismas reglas. Pero también se encargará de acreditar y certificar hospitales, clínicas, centros médicos y a los propios médicos. Además, velará por el cumplimiento de las garantías ofrecidas en el AUGE.
Autonomía: 56 hospitales tendrán la categoría de autogestionados en red. Esto les permitirá mayor flexibilidad en el uso de sus recursos y personal, terminando con las rigideces actuales. Además, se premiará la buena gestión.
Consultorios: Consultorios municipales y privados en convenio recibirán el mismo aporte per cápita y además se fiscalizará el uso de los recursos entregados a los municipios.
Calidad: El ministerio de Salud fijará estándares de calidad que deberán seguir hospitales y clínicas para ser acreditados.
Subsecretarías: Se crean dos subsecretarías. Una para verificar el funcionamiento de los hospitales y otra para la aplicación de las políticas de salud pública.
Participación: Se permite participación ciudadana en consejos en hospitales y servicios de salud, los que deberán se convocados obligatoriamente por el ministerio de Salud.
