COPIAPÓ.- El Obispo de Copiapó, Gaspar Quintana, sostuvo hoy que el que no haya "ninguna imputación" hasta ahora por parte de la Fiscalía de Copiapó permite que los dos sacerdotes denunciados por abusos deshonestos en la zona sigan "siendo de mi plena confianza".
"Los considero inocentes mientras la justicia ordinaria no pruebe lo contrario", aseveró el prelado, quien además manifestó que el nombramiento de un "promotor de la justicia" por parte de la Iglesia Católica sólo busca aclarar las denuncias en contra de los religiosos acusados de violación y abusos deshonestos. Esta medida "no obstaculiza para nada" la labor de los tribunales civiles, agregó.
En conversación con Radio Cooperativa, Quintana explicó que el sacerdote franciscano Rogelio Vouters fue designado "hace meses atrás" y su función no sólo se remite a estos casos, pues el "promotor de la justicia es una figura jurídica que existe ya en el derecho de la Iglesia, y está prevista su tarea como para todo lo que se refiere al bien común".
El Servicio Nacional de Menores (Sename) pidió a la Justicia de la Tercera Región investigar las denuncias en contra del vicario de Copiapó, Aquiles Altamirano, y del sacerdote Eliecer Huenchumán. El primero es acusado de violar a una alumna del Liceo Católico de la capital regional, mientras que el segundo es sindicado como autor de abusos deshonestos en contra de un niño.
La autoridad eclesiástica subrayó que a pesar de la querella que presentó el Sename, aún "no hay razones de peso" para suspender a los curas, por lo que ambos siguen "ejerciendo su ministerio".
El obispo de la Tercera Región pidió a los fieles "no perder la calma", ya que "en la inmensa mayoría de los casos son rumores".
