SINGAPUR.- El Presidente Ricardo Lagos manifestó su esperanza de que se resolverá el conflicto energético con Argentina, originado por la decisión del gobierno trasandino de recortar los envíos de gas natural a Chile.
En una entrevista con Reuters y la agencia de noticias española EFE, el Primer Mandatario intentó poner paños fríos a la situación en una línea más conciliadora. Afirmó que los acuerdos internacionales deben ser respetados si bien dijo que entendía por qué Argentina sentía la necesidad de restringir las exportaciones.
"Estamos confiados. Estamos trabajando juntos con Argentina", dijo el Jefe de Estado en su último día de visita a Singapur.
"En el largo plazo, nosotros tenemos un entendimiento estratégico con Argentina, y yo pienso que vamos a poder resolver esta crisis para el bien de ambos países", agregó.
Más tarde, en conversación con radio Cooperativa, el Mandatario afirmó que su preocupación y la del Gobierno es asegurar que el suministro de combustible y electricidad esté garantizado para todos los chilenos.
Precisó que para lograr este objetivo, se recurrirá a todos los medios, si bien recalcó la necesidad de agotar el diálogo antes de "enfrascarnos en discusiones jurídicas internacionales".
"La preocupación del Gobierno son los consumidores y la satisfacción de ellos. Por tanto, nuestros esfuerzos están en enfrentar esta situación y poder garantizar que los consumidores podrán tener el gas al cual ellos tienen derecho", declaró.
Consultado acerca de las palabras del Presidente argentino, Néstor Kirchner, quien dijo que Chile debía hacer sus reclamos a las empresas petroleras y no al Gobierno, Lagos reconoció que el conflicto energético con la nación vecina es "un tema entre privados".
Sin embargo, hizo hincapié en que el origen del recorte en los envíos de gas natural a Chile es una decisión de la Casa Rosada, por lo que el reclamo a su par Néstor Kirchner es válido.
"Lo que ocurre es que para que la empresa privada argentina le venda a la chilena se firmó un protocolo en 1995 donde se establecen cuáles son las regulaciones por las cuales se hace esta operación comercial", agregó.
"La dificultad estriba en que cuando la empresa argentina le dice a la chilena que no puede enviarle más gas y aduce como razón el que hay una disposición del Gobierno argentino en esa dirección, entonces, claro, es una responsabilidad de las empresas. Pero cuando una empresa dice que hay una disposición gubernamental, es evidente que en último término hay un decreto que hace el tema mucho más complejo para la empresa poder cumplir", señaló.
Lagos sostuvo además que "los amigos argentinos no tienen que ver a Chile como parte del problema", argumentando que hoy día el 20 por ciento del gas que se produce en Argentina se exporta a Chile y que gracias a esa transacción hay mayores ingreso
