SANTIAGO.- En forma unánime, la Novena Sala de la Corte de Apelaciones de Santiago resolvió denegar la libertad a dos de los tres chilenos procesados por su participación en la red de cibernautas pedófilos que fue desarticulada en seis países con apoyo de la Guardia Civil de España.
Se trata del ingeniero Francisco Javier Menares, quien encabeza la conexión chilena de la organización, y del estudiante universitario Diego Ramírez. Ambos solicitaron el beneficio luego que el martes pasado el mismo tribunal otorgara la libertad a Claudio Paredes, quien también integraba la red.
La Corte, conformada por los ministros Hugo Dolmestch, Amanda Valdovinos, y la abogada integrante Ángela Radovic, confirmó así la decisión de la jueza del Tercer Juzgado del Crimen de la capital, Verónica Sabaj, quien rehusó concederles la libertad por considerar que representan un peligro para la sociedad.
Tanto Paredes como Ramírez y Menares están procesados por asociación ilícita y almacenamiento y posesión de material pornográfico infantil.
Los tres chilenos, en cuya posesión se encontraron más de 10 mil imágenes de pornografía infantil, fueron aprehendidos el 14 de abril pasado en el marco de la operación "Global", que comenzó hace dos años en España y luego se extendió a Argentina, Brasil, Colombia, México y Chile, acumulando una veintena de detenidos y procesados.
La investigación internacional estableció que los implicados operaban en internet como una comunidad cerrada, intercambiando imágenes y videos de pornografía infantil y textos con relatos pedófilos, mediante páginas web, correos electrónicos y foros dirigidos a menores de edad, haciendo apología del abuso sexual.
Según la resolución judicial, Claudio Paredes, está acusado de proporcionar "material constituido por fotografías de menores ejecutando prácticas sexuales (...) para ser empleados en la comunidad denominada Miniaturas 100", una asociación ilícita de origen extranjero dedicada a la pornografía infantil.
