Matute se muestra más conciliador y dispuesto a tener una campaña de "guante blanco".
CONCEPCIÓN.- El sábado 5 de marzo de 2000, todo Concepción concentró sus miradas en las cuatro cuadras que separan el edificio de los tribunales de la catedral de la ciudad. Ese día, la familia Matute Johns encabezó la primera marcha por la memoria de su hijo, desaparecido cinco meses antes. Cientos de penquistas los escoltaron en silencio, acompañándolos en su dolor. En medio de la multitud, a pocos metros, marchaba la entonces concejala de la Unión Demócrata Independiente, Jacqueline Van Rysselberghe.
La psiquiatra, que tenía experiencia trabajando con familias de niños y jóvenes asesinados, se acercó en su momento a los Matute y gestionó financiamiento para algunas gigantografías de Coke. Cuatro años más tarde, Jorge Matute Matute y Jacqueline Van Rysselberghe vuelven a encontrarse, pero esta vez marchando en veredas opuestas: el padre del desapacido fue confirmado por la DC para darle la pelea a la actual alcaldesa en los comicios municipales de octubre.
La Concertación necesitaba esta vez un candidato con un perfil diferente, porque no podían darse el lujo de sufrir una derrota tan aplastante como la que la abanderada de Lavín le propinó el 2000 al alcalde PS Ariel Ulloa, en una ciudad que tradicionalmente ha sido feudo de la izquierda. Y más considerando que la elección pasada se definió por un voto de castigo al edil socialista. Hacia el final de su mandato éste se había ganado antipatías, incluso entre sus propios correligionarios. En la Concertación sienten que aún están pagando por "la poca inteligencia emocional" de Ulloa: no supieron frenar a Van Rysselberghe en su momento, y ahora tendrán que hacer lo imposible por vencer a una alcaldesa bien evaluada y con carisma.
La DC —que tras las negociaciones con los demás partidos oficialistas se quedó con el cupo para postular en Concepción— lo entendió así y decidió apostarlo todo a una carta completamente nueva.
El candidato natural, el ex intendente Martín Zilic, había decidido no disputar el cargo, por estar comprometido en un ambicioso proyecto de la Universidad de Concepción con Naciones Unidas, y porque además estaría evaluando postular a las parlamentarias del próximo año. Después de él, ningún otro político local parecía tener el peso suficiente para medirse con Van Rysselberghe.
Entonces la Democracia Cristiana posó sus ojos en Matute: dirigente sindical, presidente Nacional de los Trabajadores del Petróleo y militante falangista por más de 20 años. Pero sobre todo, un hombre que, en su lucha por encontrar a su hijo desaparecido, se había transformado en un hombre público, mediático y reconocible en todo el país.
En abril, algunos dirigentes de la DC provincial comenzaron a tentarlo para ir como candidato. Pero Matute dijo que no. Había pasado poco más de un mes desde el hallazgo de los restos de su hijo Coke, y se sentía ‘‘cansado y poco preparado, física y mentalmente, para un desafío tan duro’’.
Pero la DC insistió. El senador Hossaín Sabag y el mismo Adolfo Zaldívar le pidieron que lo pensara. Finalmente, el sábado 12 de junio, el dirigente sindical dio el sí, en una ceremonia en que la CUT, la Unión Comunal de Juntas de Vecinos, los trabajadores del petróleo y la Comunidad de Mujeres por la Justicia y la Paz, le ofrecieron su apoyo irrestricto. Eso y 10 mil firmas que respaldaban su candidatura.
"Sublimar el dolor"
Paradojalmente, las primeras voces que se opusieron a su postulación no vinieron de sus opositores, sino de su propia casa. Su ex esposa, María Teresa Johns (de la que se encuentra separado sólo formalmente), piensa que en la DC quieren aprovecharse de la imagen de Coke y del dolor de su familia.
Justifica: "Jorge lleva 20 años en el partido. ¿Por qué se fijan en él ahora? Yo creo que hay momentos y momentos para hacer las cosas, y nosotros ni siquiera hemos enterrado a Coke. Jorge es una persona grande. Él sabrá lo que hace, pero yo no estoy de acuerdo".
El mismo Jorge Matute reconoce que la gente lo ubica por lo que ocurrió con su hijo, pero asegura que jamás permitiría que se utilizara la imagen de éste como un instrumento de su campaña. Precisa que quiere darle un sentido diferente a su dolor, ayudando a otras personas.
Ricardo Barrenechea (DC), presidente del sindicato de trabajadores de Petrox, entiende la preocupación de María Teresa Johns, pero lamenta que no haya entendido bien que lo que busca es "sublimar el dolor" que siente por Coke. Ejemplifica: "El marido de Corazón Aquino fue asesinado cuando era candidato a presidente. Un año después, ella misma fue elegida presidenta de Filipinas".
Pero no toda su familia le dio la espalda a Matute: su hijo Alex lo apoyó públicamente, neutralizando así las opiniones negativas de su madre. El gesto no es menor considerando que, según dirigentes locales de RN, éste sería simpatizante del partido de Piñera. La misma fuente asegura que incluso se le preguntó si, en el futuro, le interesaría representar a esa tienda en alguna elección.
De guante blanco
En Santiago, la mesa directiva esperó hasta el último minuto para dar el vamos definitivo a la candidatura de Matute. Sabían que se trataba de una alternativa delicada, y por eso quisieron evaluar bien los pro y los contra y sondear sus posibilidades reales, aún cuando desde un principio tenían la disposición de darle el cupo.
En estricto rigor, hasta hace algunas semanas en el partido de la flecha roja aún se estudiaba una alternativa a Matute: Juan Ignacio Ugarte, ex gobernador de Concepción y ex presidente del directorio de Correos de Chile. Pero esta opción quedó prácticamente descartada el 12 de junio, cuando la Provincial DC —encabezada por el abogado Sergio Mico— anunció con bombos y platillos que Matute "era el hombre". Una jugada audaz, porque aún faltaba la confirmación de la mesa nacional. En el partido asumen que después de eso habría sido impresentable echar pie atrás.
La alternativa "Ugarte" —asegura un concejal penquista de la Alianza por Chile— podría haber resultado más peligrosa para Jacqueline Van Rysselberghe que el mismo Matute. "Juan Ignacio tiene más manejo político y puede ser más agresivo; habría buscado restregarle las debilidades al municipio", razona.
En ese sentido, Matute se muestra más conciliador y dispuesto a tener una campaña de "guante blanco". Pese a esto, el abanderado demócratacristiano ya está definiendo donde concentrará sus críticas. Ya se prevee que uno de sus caballos de pelea será el tema de la basura, una de las espinas que más ha aproblemado a la edil en los últimos meses.
En palabras del senador José Antonio Viera Gallo la administración de Van Rysselberghe "ha sido más bien opaca; muestra más imágenes que contenidos". De ahí a que el énfasis de la Concertación estará puesto en demostrar que buena parte de los avances obtenidos en Concepción, se deben más a la gestión del gobierno que a la municipal.
La alcaldesa, en todo caso, está convencida que será reelecta, aunque reconoce que su triunfo podría ser menos holgado que el del 2000. Asegura que su estrategia electoral será positiva, avocada a mostrar cómo han logrado optimizar la capacidad de gestión, pese a la falta de recursos. Por eso, dice, le resulta indiferente a quién lleve la Concertación de candidato.
Será a Jorge Matute al que le toque un trabajo más pesado. Su gran desafío —apuntan partidarios y oponentes—, será cristalizar su popularidad en intención de voto. Un paso más difícil de lo que parece.•
Una hija de Lavín al municipio
En las elecciones de octubre entrará el rigor la reforma a la Orgánica Constitucional de Municipalidades, que establece la elección separada de alcaldes y concejales. En razón de esta modificación, la lucha por los otrora mal mirados sillones de los Concejos Municipales, se puso mucho más interesante para los partidos.
Pero en Concepción, esta elección podría ser doblemente llamativa. Ya está virtualmente confirmado como candidato a concejal por la UDI, el hermano de la alcaldesa, Enrique van Rysselberghe (28), ingeniero comercial y docente de la Universidad del Desarrollo. También se evaluó la conveniencia de que postulara Asunción Lavín (23), hija del edil de Santiago que estudia Educación Diferencial en la Universidad San Sebastián de Concepción. La estudiante habría manifestado su interés por ser candidata por la ciudad, pero finalmente se descartó la opción. En su lugar, correría por Florida (VIII Región), Hualqui o Coronel. La decisión final la tomará la UDI en Santiago, y en última instancia, su padre.
Independiente de los lazos familiares, está contemplado que, durante la campaña, el líder de la Alianza por Chile viaje varias veces a Concepción a apoyar a la alcaldesa, su más probable jefa de campaña para las presidenciales del 2005. Concepción es considerada la segunda ciudad más importante del país, y la UDI está dispuesta a poner todas sus cartas en el mantel para conservarla. Más ahora, cuando el escenario de la lucha por la alcaldía de Santiago es mucho más incierto que en el 2000.
LAS CIFRAS DEL 2000
En la última elección municipal, Jacqueline Van Rysselberghe obtuvo un 55,29% de los votos, mientras que su contendor, el edil Ariel Ulloa (PS), sólo alcanzó un 32,7%. Según sondeos recientes, se estima que Jorge Matute, incluso antes de iniciar la campaña, ya tiene un piso más alto que el de Ulloa. Pese a ello, el trecho a acortar sigue siendo largo.
