SANTIAGO.- "Siempre que vengo a Chile vengo a ver a mi amigo José Miguel Insulza". Con esas palabras el abogado Claudio Grossman, quien elaboró un informe sobre las implicancias jurídicas en Chile de las cuentas de Augusto Pinochet en Estados Unidos, explicó el motivo de la reunión que sostuvo esta tarde con el vicepresidente en La Moneda.
Tal como sucediera pasado el mediodía tras un encuentro que sostuvo en el Ministerio de Relaciones Exteriores, el experto en derecho internacional sólo utilizó limitadas declaraciones para explicar su presencia en Chile, dando muy pocas luces acerca del informe que elaboró para el Gobierno y que entregó esta mañana en la Cancillería.
A pesar de las insistentes consultas de la prensa, Grossman no quiso entrar en detalles acerca de los eventuales escenarios jurídicos que se presentarían de desatarse una investigación en el extranjero contra el general (r) a raíz de las cuentas bancarias que surgieron de una investigación efectuada por un subcomité del Senado norteamericano.
Con amables palabras, similares a las expresadas algunas horas antes, el jurista explicó que "entiendo el interés que hay de saber (...) pero en relación a los contenidos y otro tipo de informaciones ustedes tienen que preguntarle a Cancillería".
"Yo no voy a darle ninguna respuesta (respecto del informe) porque lo que me ha pedido la Cancillería es una asesoría, y el resultado de esa asesoría corresponde a ellos", agregó para argumentar su negativa a entregar datos de su informe.
Grossman, decano de Derecho de la American University, llegó a Chile el sábado para incorporarse como consultor a una firma de abogados chilenos.
El jurista viajará mañana a Buenos Aires para enterarse de los avances del proceso por el ataque terrorista al Centro Judío AMIA ocurrido la década pasada, en su calidad de observador de la Corte Internacional de Derechos Humanos.
