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Iglesia despide los restos del sacerdote asesinado en la Catedral

En la misa fúnebre participaron autoridedes de Gobierno, del clero católico y de otras iglesias, familiares y amigos para depedir los restos de Faustino Gazziero.

27 de Julio de 2004 | 10:33 | Felipe Gálvez T, El Mercurio en Internet
SANTIAGO.- Mientras afuera caía una persistente lluvia, al interior de la Catedral de Santiago, y con la presencia de más de un centenar de personas, autoridades y familiares, los restos del sacerdote italiano Faustino Gazziero eran despedidos, en una misa celebrada por el cardenal Francisco Javier Errázuriz.

Hasta el lugar llegaron el Presidente de la República, Ricardo Lagos, junto a su señora Luisa Durán; el alcalde de Santiago y abanderado de la Alianza por Chile, Joaquín Lavín; el ministro de Justicia, Luis Bates; el presidente de la Cámara de Diputados, Pablo Lorenzini; el Intendente de la Región Metropolitana, Marcelo Trivelli; el subsecretario del Interior, Jorge Correa Sutil, entre otros.

A las autoridades de Gobierno se sumó la presencia de más de 70 representantes del clero católico, entre ellos cerca de 50 sacerdotes y 20 obispos, y de otras iglesias, como es el caso del arzobispo ortodoxo de Antioquía, Sergio Abad. También estuvieron presentes los familiares del sacerdote Gazziero, quien fue asesinado el sábado pasado por el coyhaiquino Rodrigo Orias Gallardo.

Al momento de iniciar la misa, el cardenal encendió un cirio pascual en señal de vida y de vida eterna.

"Un golpe seco despertó nuestro sufrimiento. Un hermano sacerdote gime, herido de muerte ha caído al suelo, víctima de un ataque sorpresivo cuando terminaba de celebrar la santa misa. Y ha caído en la Iglesia Catedral, la casa de Dios que ha albergado al pueblo de Chile para celebrar sus triunfos y llorar sus desencuentros. En medio de tanto estupor, buscamos la misericordia de Dios", fueron las primeras palabras expresadas por el cardenal Errázuriz en la homilía.

Junto con agradecer la presencia del Presidente de la República y otras autoridades así como la de pastores y fieles de iglesias hermanas, el arzobispo sostuvo que "para el padre Faustino, morir en esas circunstancias le reportaría la recompensa grande en el cielo que Jesucristo prometió a los que fueran odiados por causas suyas (...) Fue abatido por ser un hombre de Dios".

Como reflexión dentro de su homilía, el padre Errázuriz llamó a salir fortalecido de este trance. "A los cristianos les pido: Unamos nuestras fuerzas para ir siempre al encuentro de Jesús, para ser realmente discípulos suyos".

Uno de los momentos más emotivos de la ceremonia se vivió cuando un grupo de sacerdotes se acercó al féretro del padre Faustino para encomendarlo a Dios y rezar el responso y la oración del Padre Nuestro.

Tras ello el cuerpo del sacerdote Gazziero fue despedido con un sostenido aplauso de los fieles que lo acompañaron hasta la carroza fúnebre, momento en que aprovecharon de cantar las últimas alabanzas y rezos en un emotivo gesto.

Posteriormente un cortejo fúnebre rodeado de personas que alzaron sus pañuelos blancos inició el recorrido hacia el Cementerio Católico donde fueron sepultados los restos del sacerdote.

Reacciones

Una vez terminada la ceremonia, el Presidente Ricardo Lagos sostuvo brevemente que "el Cardenal habló por todos nosotros respecto de lo que significó el padre Faustino en vida y respecto de las enseñanzas que debemos extraer de este hecho tan doloroso y lamentable".

El Mandatario agregó que es deber de la sociedad hacer esfuerzos para ver cómo construir un país donde estos hechos no ocurran ni se repitan.

En tanto, el alcalde de Santiago, Joaquín Lavín manifestó que "espera que estos actos de fanatismo religioso nunca más ocurran en un país como Chile. Conocí al padre Faustino, vine muchas veces a sus misas. Es un hombre santo que entregó su vida a Chile como misionero y que ya está en el cielo".

El edil agregó que "es de esperar que, aunque la Iglesia hable de perdón, tiene que haber justicia".

El presidente de la Democracia Cristiana, Adolfo Zaldívar recalcó que "éste es un momento de reflexión para todo el país", y agregó que "es importante que toda la sociedad chilena reflexione por qué ocurre una cosa como ésta".

Por su parte, el Intendente Marcelo Trivelli sostuvo que "hay que estudiar las consecuencias de este horroroso crimen y determinar si es que hay sectas o grupos involucrados. Ahí es donde está la labor más clave de lo que debe hacer nuestro quehacer hacia futuro".