SANTIAGO.- El Comandante en Jefe del Ejército, Juan Emilio Cheyre, afirmó que la institución castrense "está sufriendo mucho" por los procesos judiciales que enfrentan algunos de sus miembros, muchos de los cuales han muerto sin que aún se dicten condenas.
Cheyre pronunció estas palabras al encabezar la ceremonia de conmemoración del atentado perpetrado hace 18 años contra el general (R) Augusto Pinochet, en el que murieron cinco de sus escoltas y otros doce resultaron heridos.
El jefe castrense señaló que el ataque, cometido el 7 de septiembre de 1986 por miembros del Frente Patriótico Manuel Rodríguez (FPMR), fue producto "de un odio intenso y sin motivo".
"El Ejército ha sufrido mucho y está sufriendo mucho. Por eso yo en ellos hago el recuerdo más sentido de todos los que han sufrido. El Ejército no tiene odios pero tampoco quiere compararse con nadie, porque para mí es importante el dolor del más poderoso y el dolor del más humilde, porque he sido testigo de la tragedia en la que nos sumió una crisis que nunca debiera haber existido", declaró en alusión al sufrimiento de los familiares de detenidos desaparecidos.
"Quisiera -subrayó- que este sentimiento de odio jamás volviera en nadie y por eso en esos soldados y Carabineros siento muy profundo el dolor y siento también el dolor de otras víctimas en otros casos completamente diferentes".
Cheyre abogó por la reconciliación entre los chilenos y aseguró que tanto los familiares de los escoltas muertos como el Ejército han perdonado a los autores de la emboscada.
El ataque se produjo en un sector conocido como "Cuesta Achupallas", cuando Pinochet regresaba a la capital tras pasar un fin de semana en "El Melocotón".
El entonces gobernante salió providencialmente ileso del ataque, pues un cohete que dio directo en su automóvil no explotó.
