SANTIAGO.- El abogado Eduardo Contreras, querellante en el caso Operación Cóndor, reaccionó con molestia a las palabras del Comandante en Jefe del Ejército, Juan Emilio Cheyre, referidas a la lentitud de la justicia para tramitar las causas de derechos humanos que involucran a ex uniformados.
"Las declaraciones del general Cheyre me parecen deplorables, insólitas y peor me parece la reacción de los personeros de Gobierno. Esto lo ha colocado en la frontera de lo inconstitucional y lo ilegal. No puede un Comandante en Jefe permitirse aconsejar, sugerir o hacer este tipo de peticiones al Poder Legislativo, Ejecutivo ni menos al Judicial", afirmó.
El jurista consideró que los dichos del jefe castrense son impertinentes e imprudentes, coincidiendo así con lo expresado por el presidente del Partido Socialista, Gonzalo Martner, quien dijo que Cheyre debe cesar sus intervenciones, ya que "no tiene nada que estar diciéndole al mundo político y menos aún respecto de cuestiones que le competen a los historiadores o a los tribunales de justicia".
En entrevista con Reportajes de El Mercurio, el general Cheyre declaró que la deuda de los políticos con los militares no está saldada, ya que mientras los primeros, que provocaron las condiciones para el colapso de la democracia, se han reconvertido, al Ejército no le ha sido posible y eso hace que algunos de sus miembros miren el futuro con frustración.
Al enumerar los casos de procesamientos y condenas a militares, dijo que se debiera fijar un límite prudencial a las causas de derechos humanos.
"No quiero mandarle mensajes a nadie, pero desde agosto de 2003 hay un proyecto de ley pendiente que, me parece, es para contribuir a solucionar esto. No es culpa de los tribunales. No quiero una amnistía espuria, pero tiene que haber un límite prudencial en los procesos", sostuvo el jefe del Ejército.
