SANTIAGO.- Un catastro realizado por el Colegio de Profesores reveló que el 93 por ciento de los educadores no realizará este año el proceso de evaluación docente, acatando el llamado del Magisterio.
El presidente nacional del Colegio, Jorge Pavez, junto a dirigentes nacionales de la orden, instó a los alcaldes a apoyar la decisión magisterial y confirmaron que no habrá sanciones para los maestros que no sean parte del proceso.
Pavez comentó que recibieron un amplio respaldo de los docentes y que, por eso, es un hecho que el proceso no se podrá realizar durante el 2004.
El dirigente valoró el gesto de los educadores, que debieron resistir todo tipo de presiones y hasta informaciones falsas que buscaban sumarlos a la evaluación. Por ejemplo, desestimó que los maestros que no hagan el proceso sean catalogados como "insatisfactorio", porque "hasta el propio ministro Sergio Bitar lo negó ayer".
El líder de los profesores comentó que sostuvo el miércoles recién pasado una reunión con el ministro, en la que cada uno expuso sus posiciones pero que no encontraron acuerdo. "Tenemos opiniones distintas, el ministro insiste en que la evaluación debe hacerse este año, nosotros decimos que el próximo y parece que los profesores escucharon nuestro llamado", comentó.
Pavez señaló, además, que los profesores que no sean parte de la evaluación durante este año deberán sumarse en el próximo proceso en julio y no en abril, como había planteado el magisterio. "El ministro nos explicó que, por razones presupuestarias, era imposible hacerlo de manera separada", precisó.
Para solucionar lo antes posible los puntos conflictivos, el Colegio de Profesores reiteró su llamado para que se restablezca una mesa tripartita y se zanjen las diferencias que el Colegio estima como "puntuales".
Pavez reiteró que el Magisterio se hará parte de la evaluación sólo cuando salga el reglamento que en estos momentos se tramita en Contraloría y se establezcan tres puntos que se encontraban en el documento consensuado y que posteriormente desaparecieron.
Éstos eran el pago de una indemnización para los educadores que son evaluados insatisfactoriamente, el modo de apelación para los profesores y las causales que le permitan postergar el proceso por un año.
En ese sentido, el dirigente recalcó que aunque salga el reglamento con la Contraloría en el corto plazo, la evaluación no puede realizarse porque coincidiría con el fin de año, que es el período de mayor actividad de los maestros.