SANTIAGO.- Más que a actos terroristas, el gran aparato de seguridad desplegado por el gobierno chileno para el próximo foro APEC 2004 estará alerta a las sucesivas protestas de rechazo a la reunión multilateral, que estarán centradas en la imagen del Presidente estadounidense, George W. Bush.
Cada día de la última semana se ha realizado al menos un encuentro contra la 12a. cumbre de líderes del foro de Cooperación Económica del Asia Pacífico (APEC, por sus siglas en inglés) que se desarrollará en Santiago este fin de semana, los que han terminado con decenas de detenidos y daños por bombas de ruido.
"Bush representa todo lo que nosotros no queremos. Representa la violencia, la mentira y el poder económico concentrado que se hace valer en el pueblo. Es el peor terrorista de todos", dijo Alejandro Valenzuela, uno de los organizadores de la única protesta autorizada contra el foro.
Pese a que las preocupaciones de las autoridades visitantes se han centrado en eventuales atentados contra sus líderes, el gobierno chileno está confiado en que la baja conflictividad interna se reflejará en un encuentro tranquilo, que no será oscurecido por protestas aisladas.
"No tenemos antecedente alguno sobre riesgos de terrorismo internacional en Chile hasta la fecha. La preocupación más visible es una preocupación más bien de orden público", dijo a Reuters el subsecretario del Interior, Jorge Correa.
El gobierno sólo ha dado su venia a una marcha masiva y pacífica contra el encuentro el viernes 19, que es organizada por el Foro Social Chileno, un grupo de intelectuales que rechazan el calificativo de anti-globalización, ya que se autodenominan "altermundialistas".
"Sí debemos prevenir del muy probable riesgo de que en medio de la manifestación (oficial contra APEC), grupos violentos la infiltren ... violentos, no terroristas", agregó Correa.
Grupos más radicales, como el llamado Colectivo Anti APEC, preparan manifestaciones paralelas a la autorizada, en las que esperan realizar cualquier tipo de acción con el fin de hacer lo más desagradable posible la estadía del líder estadounidense en el país.
"La expresión en la calle es legítima. Copar una calle, manifestarse, lanzar panfletos, rayar murallas, prender fogatas, son expresión de desesperación de un pueblo que quiere manifestarse y que repudia esto: el APEC, a Bush, que son todo lo mismo", dijo Patricio, portavoz del grupo Zona Antifascista.
El depliegue
El desafío de seguridad para el Estado chileno que representa la reunión de los 21 integrantes de APEC, equivalentes al 60 por ciento de la economía mundial, es el mayor que ha enfrentado desde la visita del Papa Juan Pablo II en 1987.
El gobierno, que decretó un feriado especial en Santiago para el viernes, cortará las principales arterias de la capital para aliviar el desplazamiento de los líderes y dispondrá, según cálculos de la prensa, de unos 5.000 agentes para la cumbre.
Las medidas de seguridad del gobierno han enervado a los anti-APEC, quienes las consideran un abuso de autoridad.
"Estas medidas son absolutamente innecesarias, porque no se condice el gasto enorme en equipamiento para las manifestaciones que vamos a hacer", dijo el dirigente sindical Víctor Quijada.
Sin embargo, la policía estima que son disposiciones acordes a la altura de los visitantes.
"Queremos un encuentro en que, a través de la eficiente prevención policial, evitemos hechos irregulares que afecten la normalidad del gran foro internacional", dijo el director de la policía uniformada de Carabineros, general Alberto Cienfuegos.
Pese a que gobiernos como el de Estados Unidos y Rusia están en permanente alerta por eventuales amenazas, Chile ha minimizado el riesgo y asegurado que no existen ni siquiera sospechas sobre la presencia de personas vinculadas a grupos considerados terroristas por la policía internacional.
El reciente secuestro masivo en Osetia del Norte, el atentado a una estación de trenes en Madrid y la guerra al terrorismo lanzada por Estados Unidos tras los ataques a Nueva York y Washington el 2001, han contribuido a la tensión de los servicios de seguridad, más aún cuando se reúnen importantes líderes.
En el caso del foro APEC, no sólo estará Bush, sino que en una misma sala se encontrará con los presidentes de Rusia, Vladimir Putin; y China, Hu Jintao; así como el Premier de Japón, Junichiro Koizumi, entre otros.