SANTIAGO.- El secretario general del Partido Comunista, Guillermo Teillier, y el miembro de la Comisión Política de la misma colectividad, Lautaro Carmona, informaron que el médico neurocirujano cubano, Javier Figueredo, regresó a La Habana dejando a la presidenta del PC Gladys Marín a cargo de un equipo que encabeza el médico chileno Eduardo Larraechea.
"El estado de salud de Gladys muestra algunas esperanzas de mejoría", explicó Teillier, explicando que "amaneció en el día de hoy con una leve mejoría dentro de toda la gravedad del cuadro. Nosotros guardamos todas las esperanzas que esta mejoría continúe".
Agregó que en la tradicional Fiesta de los Abrazos que se realiza los días 8 de enero en el Parque OïHiggins, se realizará un acto de homenaje a Gladys.
Indicó que respecto al diagnóstico no hay novedades respecto al último informe del doctor Figueredo: "No se ve una actividad tumoral y el proceso de deterioro se detuvo. Ella sigue en esta leve mejoría que día a día se va notando en pequeñas cosas, en su estado de ánimo, en su interés por las cosas".
Es prematuro decir si el tumor sigue actuando "para eso se van a practicar una serie de análisis en los próximos días y antes de unos 15 días tendremos un pronóstico más certero. Hay que esperar un poco", agregó Teillier.
Aclaró que Gladys "no puede caminar, no puede sostenerse en pie, tiene que estar sentada y en cuanto al tema del habla, se ha recuperado un poquito más. En lo que más se nota su recuperación es en el estado de ánimo, ella sigue luchando por su vida".
El dirigente reiteró que sigue sin recibir visitar, por prescripción médica, para evitarle un síndrome de estrés que podría provocarle angustia por no poder conversar con quienes la visiten.
Teillier confirmó que, en caso de mantenerse esta mejoría actual "de manera estable, que abriera alguna posibilidad de una recuperación mayor, podría decidirse volver a trasladarla a Cuba para su tratamiento".
Ambos dirigentes agradecieron personalmente al facultativo, al Estado, Gobierno y pueblo cubanos "y muy especialmente al Presidente Fidel Castro" por esta demostración de solidaridad, por este concepto tan distinto de lo que es la salud y por la preocupación tan al detalle que ellos manifiestan por Gladys.
Asimismo, Carmona destacó "la solidaridad muy amplia que se ha expresado desde distintos sectores, no sólo políticos, sino también sociales, culturales y religiosos y que los entendemos se manifiestan con absoluto respeto a la identidad de Gladys, como una expresión de desear lo mejor para ella en un momento tan duro, tan adverso. Creemos que son sentimientos que ojalá se instalen en la sociedad chilena como valores, por los cuales Gladys tanto luchó: los valores de la solidaridad, de la fraternidad, de la preocupación por los seres humanos estén instalados en la cultura de nuestro país, lo que era parte del patrimonio cultural que Chile tenía".
