Ayuda a las víctimas del terremoto.
SANTIAGO.- La situación que se vive en el sur de Tailandia en estos momentos es "muy difícil", relató a EMOL desde Bangkok, la capital de ese país, el cónsul chileno José Jaliliye Lanas.
El representante chileno informó que en la zona sur del país se vieron afectadas -por el terremoto y posterior tsunami- principalmente las islas.
"Hay más de 400 muertos, 5 mil heridos, también mucha gente está desaparecida", dijo el cónsul, al hacer un balance en Tailandia de la catástrofe que ayer golpeó a este país y al sudeste asiático y que se convirtió en el peor terremoto registrado en los últimos 40 años en todo el mundo.
El movimiento telúrico llegó a los 8,9 grados de la escala de Richter y se convirtió en una tragedia de proporciones para países como Tailandia, Sri Lanka, Indonesia y la India.
Una de las mayores interrogantes en este momento es saber qué sucedió con la chilena Francisca Cooper Larraín, quien se encontraba de luna de miel en Tailandia al momento del terremoto, cuyo paradero actual es desconocido.
El cónsul declinó entregar información sobre este caso.
La zona más afectada está a unos 1000 kilómetros de distancia de Bangkok, donde hoy la situación era de calma.
Respecto de la suerte que corrió el resto de la comunidad chilena en Tailandia, Jaliliye informó que la legación chilena ha "tomado contacto con ellos y los que conocemos, al menos están bien, no se han visto afectados por esta tragedia".
El diplomático explicó que casi todos los chilenos viven en Bangkok o al norte del país, por lo que no los tocó la catástrofe.
La comunidad chilena en este país es muy pequeña y Jaliliye la cifró en apenas 20 ó 25 personas. Sin embargo, este número varía en forma temporal debido a la fuerte actividad turística que registra Tailandia o bien con la visita de empresarios chilenos que llegan hasta Bangkok.
En estos momentos, el embajador chileno en Tailandia, Luis Sepúlveda Pinochet, se encuentra en el sur del país, para ayudar a los posibles afectados.
Muchos cadáveres
Uno de los principales problemas que enfrentan las autoridades tailandesas es la gran cantidad de cadáveres que quedaron repartidos después del violento golpe del terremoto o el tsunami.
"Hay muchos cadáveres. Lo que nos han dicho es que no es posible recogerlos", explicó el cónsul.
Algunas versiones han hablado del riesgo de que se propaguen epidemias o enfermedades debido a la gran cantidad cuerpos que no han sido sepultados.
Jaliliye detalló que los medios de rescate locales se han visto superados ante la magnitud de la tragedia, por lo que países como Australia o bloques como la Unión Europea (UE) ya han comprometido su ayuda y la están enviando.
Respecto de probables iniciativas chilenas para ir en ayuda de Tailandia a través de asistencia humanitaria, el cónsul aclaró que eso aún no está definido.
