RANCAGUA.- Francis Ayala Sepúlveda denunció haber sido discriminada por parte de funcionarios municipales en una piscina de la población San Francisco de Rancagua.
Según señaló Radio Digital FM, la mujer que ayer en la tarde se acercó hasta la piscina municipal, debió confeccionarse un traje a la medida, hecho de lycra que parecía de dos piezas, unido con becrón, porque sufre de cierto grado de obesidad.
"Estuve disfrutando un poco del agua, y al rato de ingresar a la piscina, llega el administrador, quien me dijo que debía salir y retirarme de allí porque vendrían de salud y los iban a fiscalizar, y si me veían a mí así dentro del agua, les iban a pasar un parte", manifestó la afectada.
La mujer agregó que "todo eso lo dijo frente a toda la gente de la piscina y estaba claro que no me querían porque estoy gordita. Eso es una clara discriminación, porque ellos argumentaron que no me permitirían con el traje de baño que yo misma había confeccionado a mi medida. Dijeron que esa ropa no se usaba en la piscina y que debía irme".
Francis Ayala presentó la denuncia por discriminación, exigiendo una indemnización en el servicio regional del consumidor, además de reservar su derecho a iniciar acciones judiciales contra el municipio.
"El ánimo no fue discriminar"
El cuestionado administrador se encuentra con día administrativo y no ha podido ser ubicado. Sin embargo, la directora del departamento de desarrollo comunitario (Dideco), María España, dijo que "nosotros como municipio tenemos claras intenciones de solucionar este problema pero necesitamos hablar con Francis, para devolverle la plata de las entradas".
Argumentó que la medida adoptada por el administrador en ese momento, "fue sin ánimo de discriminar, e incluso, otra dos jóvenes también fueron objetadas en ese instante por sus vestimentas, porque a la piscina no se puede entrar con ropa y lo que ella usaba era una polera. Además, ingresaron con short y lo deben hacer con hotpants".
El alcalde Carlos Arellano no ha querido referirse al tema.