SANTIAGO.- El ministro del Interior, José Miguel Insulza restó hoy importancia a la reunión que sostuvo el Fiscal Nacional, Guillermo Piedrabuena, con el senador Jorge Lavandero, acusado por abuso de menores.
"Yo creo que es una cosa a la cual no hay que darle demasiado bombo. Supongo que si un senador de la República le pide al fiscal nacional una reunión o una conversación es bastante normal que se la dé", señaló.
Dijo además a radio Cooperativa que no considera que el sólo hecho de haber conversado con una persona le reste autoridad o autonomía a la fiscalía para llevar adelante su investigación.
Diputado Burgos cuestiona la cita
Por otro lado, el diputado Jorge Burgos (DC) dijo que aunque no tiene dudas de la rectitud del Fiscal Nacional, es "discutible" la reunión que el jurista sostuvo con el parlamentario.
El legislador llamó a los miembros del Ministerio Público a trabajar con mayor cautela, "ya que errores en su accionar pueden atentar contra la Reforma Procesal Penal".
"A mí, lo que me preocupa es que los ciudadanos nos vamos enterando de ciertos hechos anexos a este proceso casi como una novela por entrega. Y eso, a mí, me parece que no le hace bien a la nueva justicia", indicó.
Burgos sostuvo que, pese a que Piedrabuena no puede ser cuestionado en "su capacidad y en su honestidad", hechos como el conocido el fin de semana atentan contra la credibilidad del organismo.
A juicio del diputado, otra acción cuestionable fue la declaración pública que los fiscales de la Novena Región emitieron, el pasado 14 de febrero, para rechazar declaraciones de la removida fiscal de la Araucanía, de Esmirna Vidal, en las que insistió en que Piedrabuena sabía de las acusaciones contra Lavandero.
"La reunión de los fiscales regionales para efectuar manifestaciones de solidaridad es absolutamente imprudente y reprochable", enfatizó.
Críticas de la oposición
El diputado UDI Patricio Melero, al referirse a la reunión que sostuvo Piedrabuena con Lavandero, sostuvo que más allá de calificarlo como algo legal o no, es una situación que se encuentra fuera de lo que es "la prudencia, el sentido común y el buen criterio".
En conversación con la radio Agricultura, Mellero calificó de "imprudente e inconveniente" la junta sostenida entre el fiscal y el senador. Además criticó el hecho que la reunión no se diera a conocer de inmediato. "¿Por qué las cosas tienen que saber después?", cuestionó.
Agregó que "la junta no tiene nada de malo. ¿Por qué no se dijo que se había tenido?. Pero sí se va generando en la opinión pública una cierta duda por el funcionamiento de las instituciones y se empiezan a alertar todo tipo de elucubración. Obviamente -desde el punto de vista de la institucionalidad del país, de los poderes del Estado y especialmente cuando estamos hablando de Tribunales de Justicia- creo que hay que ser riguroso con este tipo de actuaciones".
