SANTIAGO.- El obispo de Aysén, Luis Infanti, aseguró hoy que tiene sospechas fundadas de que las desapariciones de tres jóvenes en esa zona del sur chileno en los últimos meses pueden deberse a homicidios, como los ocurridos entre 1997 y 2001 en la misma región.
El religioso recalcó que los presuntos casos de asesinatos de personas en la ciudad de Aysén "se están repitiendo".
En 2002, Infanti encabezó la denuncia de la muerte de doce jóvenes ocurridas entre 1997 y 2001 que, según aseguró, estuvieron vinculadas al narcotráfico.
El religioso reiteró a la emisora radio Biobío sus acusaciones sobre presiones y desprotección por parte de la justicia local, y añadió que la jueza a cargo del caso, Alicia Araneda, forma parte de quienes realizan los hostigamientos.
Añadió que aparte de la querella por las muertes se suman tres incendios intencionales en la cárcel de la ciudad y el intento de incendio de la casa del fiscal judicial de Coyhaique.
Finalmente el obispo llamó a agilizar los procesos, que según dijo están estancados.
"Esperamos que no se demore 30 años como otras verdades", agregó.
