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Jueza sentencia a senador Lavandero a 5 años de reclusión menor

Se le concendió, no obstante, el beneficio de la libertad vigilada. El parlamentario tiene prohibión de ejercer cargos públicos de por vida, con lo que deberá abandonar su escaño en el Senado.

25 de Junio de 2005 | 15:04 | El Mercurio en Internet

El senador Lavandero, sentenciado a cinco años.
TEMUCO.- La jueza del Tribunal de Garantía de Temuco, Georgina Gutiérrez, resolvió sentenciar a cinco años de reclusión menor al senador Jorge Lavandero Illanes, condenado como autor de delitos sexuales reiterados en contra de cuatro menores de edad.

Se le concedió, no obstante, el beneficio de la libertad vigilada. Del mismo modo, le prohibió de por vida ejercer cargos públicos, con lo que deberá abandonar su escaño en el Senado.

Su asistente y chofer, Juan Carlos Espinoza, fue condenado a tres años y un día, en calidad de cómplice, pero también se le concedió el beneficio de la libertad vigilada.

La decisión, apelable, culmina por ahora con un caso que ha causado profundo impacto debido a la alta investidura de Lavandero.

La jueza tomó su decisión a pesar del cambio de defensa del senador que a última hora pidió ir a un juicio oral, a pesar de que el parlamentario había aceptado un juicio abreviado después de reconocer su responsabilidad en los hechos por los que se le acusa.


La jueza Georgina Gutiérrez durante la lectura de la sentencia.
En una extensa intervención, el recién estrenado abogado defensor, Reyniero García, expuso los argumentos que a su juicio probarían que Lavandero vio vulnerado su derecho a un juicio oral.

Sin embargo, fueron desestimados por la magistrada Gutiérrez y se rechazó la solicitud de nulidad del juicio abreviado.

En una primera declaración, tras conocer la sentencia, Lavandero dijo que es inocente, y que va a demostrarlo "cueste lo que le cueste. Soy inocente y vamos a demostrarlo", enfatizó.

La defensa de Lavandero confirmó que apelará a la sentencia, y lo propio hará el Ministerio Público.

Tras sus escuetas declaraciones, Lavandero se retiró raudo en un Mercedes verde.

Un caso que parte con rumores

Los rumores de la presencia de un "político influyente" en una red de pedofilia en la Novena Región motivaron, en diciembre de 2004, una intensa investigación liderada por el Ministerio Público junto a funcionarios especiales del Departamento V de la policía civil con el fin de indagar en los hechos.

La reacción del otrora senador de la Democracia Cristiana por la zona, Jorge Lavandero, no se hizo esperar. "Es una conspiración malévola y perversa" declaró en ese entonces el parlamentario, denunciando una campaña para dañar su imagen.

En un principio, el caso fue llevado por la fiscal regional Esmirna Vidal, pero debido a la connotación pública, fue asignado —a pedido del Fiscal Nacional, Guillermo Piedrabuena— a Xavier Armendáriz, quien jugaría un rol clave en el proceso hasta el día de hoy.

Paralelo a esta investigación de pedofilia, la Fiscalía Nacional ordenó un sumario interno para aclarar presuntas negligencias en las indagaciones realizadas por Esmirna Vidal al parlamentario, hecho que posteriormente le costaría la remoción a la fiscal de la Novena Región.

Los cargos contra Lavandero

El viernes 9 de enero de este año, en una audiencia en el Juzgado de Garantía de Temuco, la investigación del fiscal Xavier Armendáriz fue formalizada. El cargo contra Jorge Lavandero era de presunto autor de delitos reiterados de abuso sexual, los cuales habrían ocurrido a partir del 16 de diciembre del año 2000 en contra de cuatro menores de edad.

Los casos correspondían a las menores I.M.S.H. (actualmente de 13 años), M.V.G.C (actualmente de 17 años), N.V.G.C. (actualmente de 12 años), y el menor de iniciales J.J.G.C., (actualmente de 13 años), quienes habrían sido víctimas de delitos de connotación sexual, tanto en la parcela del parlamentario en Metrenco, como en la oficina del senador ubicada en calle Carrera, en la ciudad de Temuco.

En dicha audiencia también fueron mencionados los casos de las hermanas Carolina y Andrea Chávez Ulloa, hijas de los cuidadores de la parcela de Metrenco, por hechos que habrían acaecido en el predio entre los años 1992 y 1996, cuando ambas tenían 11 y 10 años de edad; y la polémica situación de Bruno Coulon Szczaranski, hijo de la actual presidenta del Consejo de Defensa del Estado (CDE), Clara Szczaransky, quien fue pareja del senador.

El desafuero, el arresto y el juicio

El 16 de marzo de este año, se dictó el desafuero de Jorge Lavandero. Esta resolución constituyó el primer paso para comenzar con el proceso.

Un mes después, el 16 de abril, el desaforado senador comienza a cumplir con un arresto domiciliario en su departamento de la ciudad de Temuco. "Me han tirado un edificio encima, pero hoy tengo más fuerzas para seguir luchando ante declaraciones y acusaciones absolutamente falsas", declaró Lavandero luego de algunos días de prisión en su domicilio. El arresto terminó el 17 de mayo, cuando la jueza de garantía, Georgina Gutiérrez dejó sin efecto la detención.

El pasado 21 de junio, con el fin de eludir el juicio oral, Jorge Lavandero decidió reconocer los hechos por los que fue acusado.

Una situación polémica por las contradicciones de esta declaración del desaforado senador, ya que tras insistir en su inocencia declaró que lo había hecho sólo por evitar la posibilidad de un juicio oral.

Sea como sea, las declaraciones no le salieron baratas a Lavandero: la Democracia Cristiana lo expulsó de sus filas y su equipo de abogados renunció cuando sólo faltaban algunas horas para conocerse la sentencia definitiva del otrora miembro emblemático de la Falange.
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