Monseñor Goic denunció presiones en el caso del sacerdote acusado. |
RANCAGUA.- El Presidente de la Conferencia Episcopal y obispo de Rancagua, Monseñor Alejandro Goic, dijo que en la Iglesia también hay pecadores, al referirse a la situación que afecta al ex director del hogar Pequeño Cottolengo, el sacerdote J.E.G.E., en el delito de supuesta violación en contra de dos menores, de 13 y 17 años, respectivamente.
Ante la pregunta de si esta situación daña la imagen de la Iglesia Católica, Goic dijo que no, "porque el mal y el pecado están en todas partes, ¿quién de nosotros no ha cometido un delito? No todos los delitos son imputables por la justicia, ¿quién de nosotros está libre de pecado?, en la Iglesia somos pecadores también", afirmó, según consignó radio Digital FM.
Pero enseguida aclaró que, en este caso en particular, se presume inocencia hasta que no se demuestre la culpabilidad.
Monseñor Goic habló en una conferencia de prensa en la que se entregó un comunicado respecto de la situación del sacerdote J.E.G.E., de 41 años. Lo hizo en compañía de Gustavo Valencia, presidente superior de la Obra Don Orione.
"Ante los dolorosos acontecimientos que afectan a menores del hogar Cottolengo, el Obispado de Rancagua y la Obra Don Orione señalan que la principal preocupación de la Iglesia es la integridad de los niños, en particular la de los más desvalidos", dice el comunicado.
Dolor en la Iglesia
Respecto de si la Iglesia siente dolor por esta situación, Goic aclaró que "siempre que un hermano es acusado justa o injustamente es un dolor. Si es injusto, esperamos que la justicia lo pruebe. Y si es justa la acusación, tendrá que asumir las consecuencias, porque el sacerdote es como cualquier ciudadano dentro del país".
"Lo que duele es que personas, sin conocer con objetividad los hechos, han condenado al director del establecimiento cuando la justicia todavía no se ha pronunciado", agregó.
El religioso acusado fue detenido el jueves último a la espera de que el Ministerio Público formalizara la investigación en su contra.
Trascendió que los hechos habrían ocurrido en las dependencias del agrotaller Betania, dependiente de la institución y ubicado a la altura del kilómetro 5 de la Ruta H-30. Allí, los menores con retraso mental severo realizan distintas actividades como parte de la rehabilitación.
En su comunicado, titulado "La verdad nos hace libres", el obispo de Rancagua señala que es importante recordar "que fue la Dirección del Cottolengo quien entregó los antecedentes al Sename de los abusos a menores, lo que evidencia la transparencia con que se ha actuado desde un comienzo".
Del mismo modo, pone énfasis en que interesa el pleno esclarecimiento de la verdad de lo sucedido.
"Anhelamos fervientemente que se haga luz en torno a estos hechos que han ofendido y dañado la dignidad de algunos niños y por ello pedimos la máxima colaboración de todos los que puedan aportar para conocer la verdad", dice el comunicado.
En su declaración de diez puntos, monseñor Goic reprueba las actitudes de algunos que han condenado a priori al Director del Cottolengo, sin tener los elementos objetivos para ello;
"también reprobamos las presiones indebidas que algunos han hecho a eventuales testigos y obstaculizado el trabajo de los Medios de Comunicación Social", sostiene.
